El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, lamentó la tragedia durante un acto oficial en el sur del país y pidió un minuto de silencio para las víctimas. “Acaba de caer un avión en la ciudad de Vinhedo, en Sao Paulo, con 58 pasajeros y 4 tripulantes, y parece que todos murieron”, dijo Lula en Itajaí (Santa Catarina, sur).