Además, Jorge decía no saber nada de ella, pues afirmó que ella tomó un vuelo sola de regreso. Estando a kilómetros de distancia, Erick Zelaya, hermano de la joven, comenzó una ardua lucha por perseguir la verdad y alertó a la policía peruana y a los medios de comunicación internacionales sobre la desaparición de Karla.