Al menos tres bodegas ubicadas en la Calle de los Alcaldes, en la capital de Honduras, fueron consumidas por un voraz incendio que deja pérdidas millonarias.
A la zona llegaron varios vehículos de los bomberos y de seguridad para asegurar que nadie se acercara a las bodegas.
Hasta el momento se desconoce qué provocó el incendio que se expandió por varias bodegas.
Una de las bodegas afectadas guardaba medicamentos y otra distribuía y producía tuberías de riego.
Muchos de los productos al interior de las bodegas hicieron que el fuego se propagara con mayor rapidez.
Las fuertes llamas provocaron que algunas de las paredes cedieran.
Por aire y tierra, los bomberos intentaban apagar las llamas del voraz incendio.
A la tarea para sofocar el fuego se unió la Policía Nacional y la Fuerza Área, que con helicópteros comenzaron a atacar el incendio desde el aire.
Los bomberos han trabajado arduamente para control el fuego al interior de los bodegas, para luego hacer una labor de enfriamiento.
Antes de que las llamas hicieran que colapsaran algunas estructuras, empleados de las bodegas intentaron salvar sus pertenencias.
Con helicópteros de las FF AA se sacó agua de la represa Los Laureles para tratar de sofocar las llamas con mayor rapidez.
Enormes columnas de humo salen de las bodegas que se están reduciendo en cenizas.
El incendio fue controlado una hora después del aviso a los bomberos.