Pelea de territorio por venta de drogas: hipótesis sobre causa de masacre en Catacamas
En el lugar, se hallaron 20 gramos de cocaína en el bolsillo de uno de los menores fallecidos, reforzando la hipótesis del narcotráfico como causa del ataque
- 18 de septiembre de 2024 a las 14:31

La reciente masacre ocurrida en el barrio El Hatillo de Catacamas, Olancho, donde tres personas, entre ellas dos menores de edad, perdieron la vida, podría estar relacionada con una disputa territorial por la venta de drogas en la zona.

El comisionado de la Policía Nacional, Miguel Martínez Madrid, declaró que las investigaciones preliminares sugieren que el enfrentamiento fue consecuencia de un conflicto entre grupos dedicados al narcotráfico local.

Martínez detalló que los agentes se encontraban realizando una operación en el barrio La Tierra cuando escucharon detonaciones de armas de fuego a pocas cuadras de su ubicación.

Al llegar al lugar de los hechos, encontraron a un grupo de sicarios atacando a las víctimas. Uno de los atacantes, conocido como “Popeye,” fue identificado como miembro de una banda de sicarios en Catacamas.

Los agentes policiales, entre ellos tres mujeres policías, repelieron el ataque. En el intercambio de disparos, “Popeye” fue herido en la cabeza y trasladado a un centro de cuidados intensivos en Catacamas, donde permanece bajo custodia de las autoridades

Un segundo sospechoso logró escapar, pero ya ha sido identificado y su captura se hará en las próximas horas.

Durante el levantamiento de los cuerpos, las autoridades encontraron 20 gramos de cocaína en el bolsillo de uno de los menores fallecidos, lo que refuerza la hipótesis de una disputa por la venta de drogas como la causa del enfrentamiento.

Las víctimas, identificadas como Wilmer Antonio Antúnez Barahona, Walter David Fúnez Osorio, y Wilmer David Fúnez Osorio, habrían estado involucradas en actividades relacionadas con el narcotráfico en la zona, según las indagaciones iniciales.

Las autoridades continúan con las investigaciones para esclarecer los hechos y dar con el paradero del sicario que huyó.

Los tres fallecidos fueron trasladados a la morgue capitalina para realizar la autopsia por ley.

La Alcaldía del Distrito Central apoyó a la familia de los fallecidos en la masacre donándoles ataúdes y la Policía Nacional realizó el traslado hacia Catacamas, en Olancho para que fueran velados.