Una cámara de vigilancia instalada en una casa particular no levantaría sospechas si es utilizada por una familia o por pandilleros. Este 16 de abril, la policía desmanteló una cámara de vigilancia que podría ser usada por criminales. Aquí más detalles.
Elementos de la Dirección Policial Antimaras y Pandillas contra el Crimen Organizado (DIPAMPCO) llegaron hasta el popular barrio El Chile de Comayagüela de la capital.
Al tratarse una zona peligrosa de la capital, tuvieron que contar con elementos que brindaran seguridad durante la operación.
En este barrio presuntamente existe presencia de pandillas que disputan el control de los territorios.
Toda aquella cámara que sea instalada sin un permiso correspondiente está sujeta a ser decomisada.
Esta cámara de vigilancia fue instalada ilegalmente en el segundo piso de esta vivienda, por lo que se procedió a retirarla.
La posición en la que fue colocada el aparato ofrecía una buena visión de las calles.
Las cámaras sin permiso de instalación levantan sospechas de que son utilizadas por estructuras criminales.
Los aparatos que fueron desinstalados quedan en poder de las autoridades policiales.
Para instalar una cámara vigilancia, se requiere de un permiso especial de la Secretaría de Seguridad. Este procedimiento aplica para casas particulares, postes y negocios.
Entre los motivos por los que estos grupos usan estos dispositivos, las autoridades apuntan que sirven para vigilar a grupos rivales.
Pero más que vigilar a los rivales, la policía ha detectado que estas cámaras suelen usarlas las pandillas para estar atentos a las patrullas que transitan.
El comisario Adán Medina informó que estas acciones continuarán para verificar qué viviendas tienen certificadas sus cámaras y cuáles pueden representar el riesgo de ser usadas por criminales.