Palmas de olivo anuncian llegada de Semana Santa en la capital
Despertando el fervor religioso de los hondureños ante la llegada de la Semana Santa, Esta tradición marca el inicio de las actividades religiosas propias de la festividad.
- 12 de abril de 2025 a las 09:59

Las palmas de olivo que adornar las calles de la capital hondureña, principalmente en los predios de la Catedral, reviven el fervor religioso en los pobladores por la llegada de Semana Santa y todas las actividades propias de la festividad.

Las palmas, provenientes del árbol de coyol, principalmente de la zona sur de Francisco Morazán, son un recordatorio de que la Semana Santa ha comenzado.

Las icónicas palmas están estrechamente ligadas al ministerio de Jesús y el sacrificio que hizo por la humanidad.

Las palmas reviven en momento en que Jesús entró a Jerusalén a bordo de un pollino (asno joven) y la gente salió a recibirlo mientras ponían a su paso mantos y palmas para crear una especie de alfombra de bienvenida.

Las sagradas escrituras revelan que mientras la gente hizo esta acción, gritaban diciendo: "Bendito el que viene en nombre del Señor".

Desde entonces se conmemora la fecha utilizando las palmas para recordar los días previos a la pasión, muerte y resurrección de Jesús.

Esta actividad tiene su punto más importante el día domingo antes de Semana Santa, conocido como Domingo de Ramos.

El Domingo de Ramos da paso a la Semana Mayor que cada año sirve como tiempo de recogimiento y devoción en la Iglesia Católica.

En Honduras cada año los pobladores del sur de Francisco Morazán traen a la capital las frescas y verdosas palmas para la festividad.

Además de los ramos, también se elaboran hermosas cruces que acompañan las procesiones.

Este domingo las palmas serán enarboladas en las calles de Tegucigalpa, durante las distintas procesiones que realiza la feligresía.

Con estas mismas palmas, algunas de ellas, serán conservadas hasta el 2026 para incinerarlas y con su ceniza celebrar el "Miércoles de Ceniza" de ese año.