Y es que la Unidad Investigativa de EL HERALDO conoció días después del crimen que el subcomisionado Melvin Alexander Alvarenga Deras ya se había visto involucrado en otra muerte de un ciudadano dentro de una celda. El hecho ocurrió el 1 de mayo de 2011, en la posta policial de la colonia Nueva Capital en Comayagüela, capital de Honduras. Ese día, el ciudadano Ramón Arístides Martínez, de 50 años de edad, fue detenido y asesinado a golpes en las instalaciones de la posta de la colonia Nueva Capital, la cual formaba parte del distrito policial de la colonia San Francisco, al mando de Alvarenga desde hacía un mes exactamente.
según las fuentes policiales, Alvarenga fue uno de los que agredió al señor Arístides Martínez, quien recién había tenido una cirugía. Sin embargo, nunca se acusó judicialmente porque fue protegido por un grupo de oficiales.
La víctima fue detenida por una denuncia de un familiar y por andar en estado de ebriedad, pero cuando los parientes llegaron para verlo a la posta policial, se encontraron con mucho hermetismo por parte de los policías y hasta comprobaron que su ingreso nunca se había registrado.
Según información remitida a la Secretaría de Derechos Humanos, la Policía había ido a tirar el cadáver atrás de la posta para que no los vinculen con la muerte.