Honduras

Al menos cinco altos mandos de las fuerzas de seguridad han sido vinculados a actos de corrupción y narcotráfico

Desde la reciente detención de un excomisionado de la Policía Nacional de Honduras, en condición de retiro, hasta la extradición y condena de un ex jefe policial, las actividades ilícitas realizadas a la par de sus funciones han corrompido a estos exoficiales

10.03.2019

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Al menos cinco altos mandos de las fuerzas de seguridad han sido señalados por actos de corrupción en Honduras.

La reciente captura del excomisionado en condición de retiro, Ambrosio Maradiaga Ordóñez, se suma a la aprehensión de otros oficiales que ostentaban importantes cargos dentro de la institución armada.

Maradiaga Ordóñez, quien fue capturado la noche del sábado en una hacienda de Guaimaca, es acusado por el delito de lavado de activos.

Otro de los sonados escándalos que vinculan a exoficiales es el caso de Sobornos. El acusado es el comisionado Liorgio Oquelí Mejía Tinoco, quien -según las investigaciones del Ministerio Público- tuvo participación en el aterrizaje de una avioneta cargada de cocaína en Choluteca, entre el 2012 y 2015, mientras se desempeñaba como jefe policial de ese departamento.

Además, es señalado por liderar una banda -de al menos nueve oficiales- que realizaban el cobro de sobornos a ganaderos en la zona sur del país.

Mejía Tinoco enfrenta tres cargos por lavado de activos, cohecho y asociación ilícita y está prófugo de la justicia desde el pasado 8 de octubre de 2018.

Más acusados por lavado de activos y narcotráfico
También en 2018, se conoció el caso del ex subcomisionado de la policía José Orlando Leiva Natarén, quien fue acusado por el delito de lavado de activos.

A Leiva Natarén se le decomisaron dos residencias, tres gasolineras, una escuela y más de 50 cuentas bancarias ya que se le detectó -junto a su esposa- un incremento patrimonial en sus bienes de 300 millones de lempiras injustificados.

Delitos

Lavado de activos, asociación ilícita,
conspiración para traficar drogas,
cohecho, entre otros, son imputaciones
hechas a los altos mandos policiales.

En septiembre de 2018, Carlos Alberto Valladares García, un exmiembro de alto rango de la Policía Nacional, fue sentenciado por la justicia de Estados Unidos por conspirar para poseer armas de fuego en apoyo de sus actividades de tráfico de drogas.

El exjefe policial fue condenado a 14 años de prisión ya que trabajó desde adentro para asegurar que la empresa criminal de Los Cachiros operara con impunidad', resumió el Fiscal Federal de Manhattan, Geoffrey S. Berman, al dictarle sentencia.

Otros seis exmiembros de la Policía Nacional, incluidos Mario Guillermo Mejía Vargas, Víctor Oswaldo López Flores, Ludwig Criss Zelaya Romero, Juan Manuel Ávila Meza y Carlos José Zavala Velásquez, entre otros, también están acusados ​​en este caso de armas de fuego y / o delitos de narcotráfico.

Cada uno de esos individuos se ha declarado culpable en una corte federal, tras haber sido extraditados.

Adicionalmente, en 2017 se conoció el caso de Jorge Alberto Barralaga, excomisionado de la Policía Nacional, que fue capturado el 31 de julio de 2017 durante la Operación 'Perseo'.

De acuerdo al expediente, en el caso en el que fue vinculado Barralaga se movieron más de 1900 millones de lempiras entre cuentas relacionadas de los imputados.

Barralaga actualmente está a la espera de que su caso sea elevado a juicio oral y público.