Choluteca, Honduras. El alcalde de Marcovia, Choluteca, Nahún Cálix, hizo un llamado urgente al gobierno central para realizar un estudio profundo que investigue las causas de la alta incidencia de insuficiencia renal en el municipio, donde más de 157 ciudadanos padecen la enfermedad.
“Exhortamos a las autoridades de la Secretará de Salud y la Secretaría del Ambiente a investigar el porqué de esta alarmante cantidad de casos. Son 45 pacientes los que han fallecido”, declaró Cálix.
La insuficiencia renal, una condición en la que los riñones no eliminan adecuadamente los desechos y el exceso de líquidos, puede ser aguda o crónica, siendo esta última más letal.
Ante esta grave situación, las autoridades locales insisten en la necesidad de realizar un estudio en Marcovia, ya que actualmente brindan apoyo a 122 personas que enfrentan la enfermedad.
“En total, 157 ciudadanos tienen problemas renales. Debemos investigar en profundidad qué está ocurriendo, porque la salud es prevención, y lastimosamente, lo que menos se está haciendo en este país es prevenir las enfermedades”, enfatizó el alcalde.
En todos los países, para evitar una crisis sanitaria por esta causa renal y llegar a los extremos de la diálisis, se hace un trabajo fuerte de prevención. Eso es lo que hace falta en Honduras, exhortó el jefe municipal.
La insuficiencia renal que puede presentarse de forma repentina, después de una lesión o como una pérdida gradual de la función renal, provocada por la diabetes, la presión arterial alta, enfermedades del corazón, el tabaquismo y la obesidad, mantiene alarmadas a las autoridades de la zona sur del país.
Los pacientes suelen buscar tratamiento solo cuando presentan síntomas como náuseas, vómitos, pérdida de apetito, fatiga, debilidad, problemas de sueño, hinchazón y presión arterial alta, entre otros. Lo que, a menudo, los deja sin posibilidades de trabajar.
Programa de apoyo
Para apoyar a esta población económicamente inactiva por la insuficiencia renal, las autoridades de Marcovia crearon un programa social de un bono de 4,000 lempiras que se entrega dos veces al año: 50% en agosto y la otra parte en diciembre.
Cálix entregó el fin de semana el bono de 2 mil lempiras, (1,500 lempras en efectivo y 500 en bolsa de alimentos), correspondiente a diciembre, a las 122 familias en las que un integrante enfrenta la enfermedad.
“Esta ayuda sale de los impuestos que pagan los ciudadanos al municipio de Marcovia y son empleados para nuestros habitantes renales que en estas fechas desea un tamalito. Nadie puede desconocer que son familias que no tienen oportunidad de trabajar”, concluyó.