Tegucigalpa,Honduras. -Mientras decenas de profesionales calificados buscan oportunidades para trabajar en el sector público, en la Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional parece que les dan prioridad a otros factores por encima del mérito y la idoneidad para contratar personal.
EL HERALDO detectó al menos 30 contratos de consultorías que firmó el titular de la Cancillería de la República, Eduardo Enrique Reina, durante los primeros días de 2025, y en varios de ellos se evidencia la contratación de personas que no cuentan con el perfil profesional ni el grado académico requerido para las actividades que desarrollan.
Los contratos con sus respectivos acuerdos fueron subidos al Portal Único de Transparencia del Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP) entre el 17 y 18 de febrero, constató este rotativo.
Las asesorías son en su mayoría por un año (del 2 de enero al 31 de diciembre del 2025), para diferentes áreas, entre ellas en materia de planificación, asesoría de imagen institucional, especialista en materia de género, comunicación institucional, asuntos de soberanía, movilidad humana, sistemas informáticos, entre otras.
Aunque en algunos contratos los perfiles académicos de quienes fueron contratados están acorde a los servicios que se describen, en otros es lo contrario.
Tal es el caso de del Contrato de Consultoría No.029-SRH-2025, el cual establece que el servicio requerido de “Consultor en Materia de Sistemas Informáticos”; sin embargo, a quien se contrató fue a un licenciado en Administración de Empresas.
Entre las tareas que deberá realizará quien fue contratado están: diseñar un sistema para la unidad de gastos de funcionamiento y representación del exterior, crear un portal de recursos humanos que se apegue al directorio activo, que permita que cada colaborador de la institución pueda solicitar constancias, visualizar su pago mensual y ver otras notificaciones desde el portal.
Además, deberá automatizar el sistema de cálculo de planillas y cesantía, conectar el sistema de marcaje para calcular automáticamente las horas extras de las personas, parametrizando los máximos y mínimos de horas trabajadas, ente otras actividades.
El monto total del contrato se hizo por 906,698.76 lempiras, es decir, el contratado devengará mensualmente por sus servicios 75,558.23 lempiras, siendo el más alto de todos los acuerdos.
Otros contratos que causan suspicacia, es el contrato de consultoría con número 005-SRH-2025, en el que se requiere de un consultor en materia de política exterior, pero a quien se dio el acuerdo fue a un bachiller técnico en Electrónica, devengando 40,000 lempiras mensuales, según estable el acuerdo.
Entre las funciones que desarrollará se encuentran “asesorar al subsecretario de Estado sobre las políticas para el área de política exterior del país, también deberá elaborar los anteproyectos de iniciativas de ley o de decretos, así como lo anteproyectos de reglamentos y acuerdos”.
La asesoría es por cinco meses, en los cuales recibirá 200,000 lempiras.
En otro de los contratos destaca la contratación de un Bachiller en Ciencias y Letras para dar consultoría en Materia de Movilidad Humana en Catacamas, Olancho; mientras que para asesorar en asuntos multilaterales se contrató a un médico cirujano.
Para la consultoría en materia de planificación el contrato se le otorgó a un ingeniero en Producción Industrial.
Son al menos 10 contratos de asesoría, de los 30 que firmó el canciller que se dieron a personas que no cumplen con el perfil académico para realizar las actividades que se describen en los mismos.
Los 30 contratos que se otorgaron a inicios de este 2025 ascienden a un monto total de 14,485,799 millones de lempiras.
EL HERALDO contactó al vicecanciller, Antonio García, para conocer sobre las contrataciones; no obstante, el diplomático indicó desconocerlas.
“No estoy al tanto. No pasa por mí, el canciller podrá explicarle”, dijo a través de un mensaje de WhatsApp.
En ese sentido este rotativo buscó una declaración del canciller Reina -vía mensaje de WhatsApp- para conocer mayores detalles, pero no respondió las interrogantes.

Irregularidades
A analistas de sociedad civil la contratación de estas personas genera suspicacia y preocupación y más si desde la Secretaría de Relaciones Exteriores se está recurriendo a contrataciones dejando de lado aspectos necesarios como la meritocracia y procesos de selección, que establece la ley.
Para César Espinal, coordinador del observatorio de política criminal anticorrupción, del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) surge la duda que, si esas contrataciones son con el objetivo que establece cada consultoría, o simplemente hacen uso de este método de contratación para darle trabajo a personas afines al partido político de turno.
“Es lamentable que se hagan contrataciones al margen de estos procedimientos o estos requerimientos, como ser la meritocracia, la formación y sobre todo el desarrollar y formarse una carrera en esa área porque se vuelve más como eso, una instrumentalización de las instituciones públicas”, dijo.
Añadió que pareciera que se está haciendo un abuso o un uso inadecuado de la figura de contratación por consultoría para ubicar en puestos de la administración pública a personas simplemente por el hecho de tener una afinidad y no la observación de los criterios técnicos especializados requeridos para desempeñar estos cargos.
El experto en temas anticorrupción lamentó que sea la afinidad lo que prima en las contrataciones de instituciones públicas.
“Las consultorías son para prestar servicios de consultor en un tema en específico, por lo que eso requiere necesariamente competencias técnicas especializadas”, apuntó.
Espinal hizo un llamado al Tribunal Superior de Cuentas (TSC) a investigar las contrataciones, porque implica la erogación de fondos públicos.
“Es muy difícil pensar que si la persona no tiene las capacidades técnicas vaya a cumplir con el producto que se requiere; entonces estaría básicamente erogando fondos públicos de manera insatisfactoria. Y es ahí entonces donde se trae en juego los fiscalizadores como el Tribunal Superior de Cuentas a nivel del Estado para poder supervisar y hacer su trabajo como ente contralor”, afirmó.

Alcances
De las 30 personas que fueron contratadas en los primeros días de enero siete son licenciados en ciencias jurídicas, cinco tienen el título de bachiller, tres son licenciados en Administración de Empresas y tres son periodistas, dos ingenieros, dos médicos cirujano, un maestro de educación primaria.
Entre las contrataciones irregulares resaltan también una secretaria comercial que fue contratada para dar consultoría en materia administrativa y fortalecimiento institucional.
Para dar asesoría sobre compras públicas del Estado se dio el contrato a un licenciado en Mercadotecnia.
Un Perito Mercantil y Contador Público será consultor en asuntos de auténticas y apostillas con un sueldo de 38,000 lempiras al mes, mientras que un licenciado en periodismo dará consultoría en materia de género, devengando L45,000 mensuales.
Juan Carlos Aguilar, director de Democracia y Transparencia de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), señaló que lo que se evidencia con los contratos es la necesidad de profesionalizar la administración pública.
“No es posible que se siga haciendo un uso y administración del personal, para este caso de cancillería, de una manera discrecional, sin que se reúnan los requisitos ya establecidos por ley, pero también haciendo el tema de los concursos, que eso debería ser lo adecuado, que sea la persona la más capaz que pueda tener acceso a ese tipo de empleos”, dijo.
Aguilar enfatizó que lo que dejan entre ver esos contratos es que se está “enchambando” a activistas del Partido Libertad y Refundación.
“Lo que nos deja ver eso es que muy probablemente lo que se eta generando son plazas, más activismo político, enchambar a correligionarios que estuvieron vinculados al partido de gobierno”, dijo.
Agregó que en todos esos contratos se requiere de expertís en el área a asesorar y muchos de los que se contrataron no cuentan con el título a fin al área.
Este tipo de contrataciones en el servicio exterior, donde prima más la afinidad que la meritocracia, parecen ser comunes, pues en 2024 EL HERALDO reveló que cerca de la quinta parte de quienes representan a Honduras ante embajadas y consulados en otros países no cuentan con un título universitario.
En ese entonces, de los 45 embajadores y cónsules acreditados en 26 países de América, Europa y Asia, el 22% tenía estudios de secundaria o eran pasantes universitarios; apenas 13 tienen posgrado y pocos cuentan con formación en diplomacia.