La rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, hizo ayer un vehemente llamado a combatir la impunidad y vencer la violencia.
Recordó que en el 2006 eran tres los departamentos del país que tenían los índices más altos de violencia: Cortés, Colón y Francisco Morazán, con una tasa de 35 homicidios por cada 100,000 habitantes.
Desde ese año la realidad comenzó a cambiar, tiñendo el país de rojo prácticamente en todos sus confines.
La lectura que se hizo en aquel momento fue que el crimen estaba atacando al Estado, cuando se asesinaban a jueces y fiscales, presumiblemente por su función pública. Ahora se suman periodistas a las cifras frías de víctimas de la violencia y criminalidad.
Autocensura
En ese sentido, Castellanos reconoció que el ataque a un periodista es un ataque a la libertad.
“Cuando no hay investigación no hay culpables y hay impunidad, lo que puede generar autocensura, miedo, lo que sería un atentado a la libertad”, explicó.
Indicó que el Estado ha ido perdiendo el control del territorio, al ser incapaz sus instituciones de tener presencia efectiva para frenar el avance del crimen.
A su juicio, es indudable que los fiscales y jueces tienen miedo de investigar y sancionar, porque no saben con qué se van a encontrar, es decir, con qué poderes.
Desde ese punto de vista, lamento que el Estado no investigue ni acuse, “por eso no se revelan nombres de vinculados al crimen organizado que se mantienen libres”.
La única protección posible es combatir la impunidad, es la piedra angular, subrayó.
Demandó a recuperar el Estado, ser más eficientes en la investigación para combatir el delito, el crimen.
En cuanto a las amenazas a los periodistas se preguntó: ¿de quién se protege la prensa, si no se sabe quién la ataca?
Según Castellanos, el Estado no debe limitarse a procesar a los autores materiales de los crímenes, sino dar siempre el siguiente paso que es procesar a los intelectuales.
En virtud de que la impunidad es un gran estímulo al delito, recomendó fortalecer la investigación, definir una ruta de prevención, protección y combate a la criminalidad.