TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El Colegio de Biólogos de Honduras (CBH) se opuso ayer a la edificación de una granja penal en las Islas del Cisne, en el Caribe hondureño.
En un extenso pronunciamiento, el CBH manifestó su profunda preocupación ante los avances en el proyecto de construcción de la cárcel en virtud que en la zona hay presencia de ecosistemas marino-costeros con características biológicas y ecológicas sumamente especiales en la región.
“Nos oponemos firmemente a la utilización de este espacio para propósitos distintos a la conservación, protección y recuperación de los recursos naturales marinos”, señala el documento.
Advirtieron que “ningún proyecto debe aprobarse sin antes haber pasado por los procesos correspondientes de licenciamiento ambiental y de revisión por parte de la autoridad a cargo de las áreas protegidas”.
Debido a la particularidad geográfica y ecológica del archipiélago, señalan los biólogos, la construcción puede significar un riesgo mayor en cuanto a la contaminación y daños físicos provocados por el tráfico de embarcaciones.
Aunque el CBH no se opone a las estrategias de seguridad y defensa del gobierno, “consideramos que existen otros espacios en tierra firme y con mejor acceso logístico, presencia de ecosistemas ya impactados y mayor capacidad tecnológica para mantener aislada a una población de privados de libertad”.
“No existe manera en que un centro penal sea compatible con los ecosistemas, especies, belleza escénica y condiciones climáticas del archipiélago. Un centro en Islas del Cisne no es ambientalmente sostenible y presenta mayor cantidad de amenazas en el corto y mediano plazo que soluciones en el largo plazo”, sostiene el CBH.
Desde la Secretaría de Recursos Naturales se confirmó que en este 2024 se abrirá la licitación del proyecto.