Tegucigalpa, Honduras
La Comisión Especial de Depuración ha separado un total de 190 oficiales y agentes de la Policía Nacional.
Ayer le tocó el turno a 33 miembros de la institución policial, entre los que se encuentran 31 policías de la escala básica, un subinspector y un inspector.
A través del comunicado número 16, la Comisión de Depuración dice que “se recibió la información solicitada a la Dirección General de la Policía Nacional sobre los miembros de la Carrera Policial que cumplieron los seis meses de disponibilidad, de conformidad a lo establecido en el Artículo 112 de la Ley Orgánica de la Policía Nacional, así como la situación actual de oficiales y agentes de Policía que han presentado solicitud de retiro voluntario, y sobre la evaluación de expedientes disciplinarios”.
Con base en el análisis y valoración de los informes recibidos, la Comisión instó al secretario de Estado en el Despacho de Seguridad a que proceda a cancelar por “disponibilidad”, en aplicación de lo establecido en el artículo 112 de la Ley Orgánica de la Policía Nacional, a un subinspector y 25 policías.
También, que se cancele por “abandono del cargo”, en aplicación al artículo 126 numeral 4 de la misma ley a un inspector y tres policías.
Además, cancelar por “retiro voluntario”, en aplicación al artículo 109 numeral 1 de la misma normativa, a un Clase I y un policía; y por último, cancelar por “muerte”, en aplicación al artículo 109 numeral 4 de dicha ley a un policía.
Reciben documentos
Actualmente, la Comisión está en la etapa de recepción de los informes de las instituciones del Estado relacionados a 241 inspectores activos de la Policía Nacional, para proceder a su análisis y evaluación correspondiente.
Se espera que en las próximas semanas se va a concluir con el proceso y determinar quiénes son los oficiales que son idóneos para continuar formando parte de la Policía Nacional o los que serán cancelados por no reunir los requisitos de idoneidad y confianza, para “servir y proteger” a la sociedad hondureña.
El proceso de depuración de la Policía Nacional se decretó por parte del Gobierno de la República luego que EL HERALDO revelara que algunos altos oficiales que integraban la cúpula policial entre los años 2009 y 2011 planificaron y ejecutaron algunas muertes consideradas como emblemáticas.
A través del decreto ejecutivo PCM-27-2016 se creó la Comisión Especial y le da la facultad para realizar una reorganización en la institución armada mediante la cual puede cancelar a los policías que ya no sean idóneos.
Los oficiales y policías que sean separados por “cancelación” recibirán sus derechos laborales.
Mientras, los policías suspendidos quedan sin cargo o asignación, a quienes se les paga su salario mensual, pero se les aplican medidas para que sus movimientos queden controlados por la Secretaría de Seguridad.
Revisan expedientes
Para realizar las cancelaciones y suspensiones de los miembros de la institución, la Comisión ha realizado el proceso de revisión de los expedientes de los oficiales y policías que contienen información proporcionada por entes contralores del Estado y operadores de justicia entre los que se encuentran: Tribunal Superior de Cuentas (TSC), Ministerio Público (MP), Procuraduría General de la República (PGR), Poder Judicial, Dirección Nacional de Investigación e Inteligencia (DNII), Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP) y el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh).