WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS.-El hondureño Geovanny Fuentes Ramírez fue condenado este martes a cadena perpetua más 30 años de prisión por las autoridades de los Estados Unidos tras encontrarlo culpable por delitos relacionados al narcotráfico.
La sentencia fue dictada por el juez Kevin Castle en la Corte del Distrito Sur de Nueva York.
“Fue un jugador clave en una conspiración patrocinada por el Estado que ha plagado a Honduras”, dijo un asistente del Fiscal en la Corte.
Fuentes Ramírez lloró antes de conocer su condena y dijo ser inocente de los cargos. “Soy un hombre de familia, nosotros los débiles pusimos nuestra fe en EEUU, hay una ley divina”, dijo el hondureño.
Antes de la sentencia el juez Castle le dijo que “mató al oficial de policía que allanó su laboratorio de cocaína y lo torturó para averiguar si su lavador de dinero estaba implicado”.
Asimismo, la defensa de Geovanny Fuentes pidió al juez que le otorgara la oportunidad de cumplir con la condena en Florida, por lo que el juez dijo que haría la recomendación.
A Geovanny Fuentes se le considera socio del Cartel de Sinaloa y del expresidente Juan Orlando Hernández, quien ha sido sancionado por Estados Unidos e incluido en la lista Engels por haber “participado en una corrupción significativa al cometer o facilitar actos de corrupción y narcotráfico, y utilizar las ganancias de actividades ilícitas para facilitar campañas políticas”.
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Antecedentes
La Administración de Control de Drogas de EE. UU. arrestó a Geovanny Fuentes, de 51 años, en marzo de 2020. Fue condenado el año pasado por tráfico de drogas y cargos relacionados con armas.
En un comunicado posterior a su condena en marzo de 2021, los fiscales del Distrito Sur de Nueva York dijeron que Fuentes era “un traficante de cocaína despiadado, poderoso y asesino en Honduras. Facilitó el envío de grandes cargamentos de cocaína sobornando a Juan Orlando Hernández”.
Durante el juicio, un testigo declaró que Fuentes había conspirado con Hernández para “meterles la droga por las narices a los gringos”. Durante esa reunión, Fuentes presuntamente sobornó a Hernández y accedió a darle acceso a su laboratorio de cocaína en Honduras.
Los fiscales habían pedido que Fuentes recibiera cadena perpetua, citando su papel en varios asesinatos y como “un actor clave en el narcotráfico patrocinado por el estado que ha plagado a Honduras”. Pero los abogados defensores habían abogado por el mínimo obligatorio de 40 años, citando su edad.
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