Antiguas casas que datan de más de 100 años de construcción y otras de décadas recientes mantienen el letrero de “se vende”, en el casco histórico de Comayagua.
Los propietarios de los inmuebles aseguran que las han puesto en venta por problemas financieros y en otros casos porque no cuentan con los recursos económicos para recuperarlas.
A causa de estas razones, la venta de casas en el centro de la ciudad colonial es cada vez mayor, al grado que en cada cuadra se aprecia un rótulo que anuncia la venta de alguna de las viviendas.
Juan José Martínez, uno de los propietarios que han puesto en venta una casa ubicada en el barrio San Francisco, aseguró que la difícil situación económica que atraviesa su familia los ha obligado a decidir rematar la vivienda donde ha permanecido durante los últimos 25 años.
“La casa tiene 350 metros cuadrados y la compre hace 25 años a un costo de 150,000 lempiras, pero debido al alto costo de la vida y los problemas económicos que enfrentamos hemos decidido venderla”, dijo Martínez.
La casa está en venta desde hace varios meses y aunque la ubicación de la propiedad es considerada como de importancia, no ha podido ser vendida debido a que el Instituto Hondureño de Antropología e Historia (IHAH) y la alcaldía no permiten que la casa sea derribada para construir otro tipo de edificación, manifestó el entrevistado.
Y es que las 35 hectáreas que abarcan el casco histórico están inventariadas y regidas bajo un Plan Maestro del Centro Histórico de Comayagua, que clasifica las propiedades en categorías según su valor histórico.
“He tenido clientes, pero cuando les digo que no pueden hacer una terraza sobre la casa o derribar paredes y hacer nuevas fachadas porque esta prohibió y solo pueden restáuralas, entonces no les parece y se van”, explicó el propietario.
Protección
El plan maestro fue elaborado por alcaldía y el IHAH, con el fin de preservar la infraestructura colonial.
Esto ha permitido que el casco histórico de Comayagua se considerado como uno de los mejores conservados del país.
Unos siete años atrás con apoyo de la Junta de Andalucía se logró la restauración de seis viviendas del casco histórico. El aporte del organismo internacional fue del 80 por ciento del valor de las obras y los propietarios aportaron el 20 por ciento restante.
Sin embargo, han quedado decenas de casas que urgen ser restauradas para evitar que sucumben.
Según Ramón Palacios, propietario de un negocio de bienes y raíces comprar una edificación en al casco histórico ha bajado de ser apetecido para los inversionistas por las limitaciones que se dan.
En el casco histórico existen unos 500 viviendas.
El costo monetario de una vivienda en el casco histórico oscila entre 1,500,000 y 3,000,000 de lempiras.