Tegicigalpa, Honduras
Ni ideologías tampoco la afiliación política son obstáculos para trabajar juntos y aunar esfuerzos por su gente.
Su hermandad no se limita a intereses partidarios y al tener una mayor representatividad en el Congreso Nacional buscan legislar no solo por el bien de Honduras, sino también por el de sus comunidades.
La 'bancadita Afroh” -de afrohondureños- es el conjunto de diputados de varias instituciones políticas que se caracterizan porque todos ellos son afrodescendientes y figuras destacadas en distintos ámbitos de la sociedad.
Las doctoras Johana Bermúdez y Norma Edinora Brooks así como los exfutbolistas Gilberto Yearwood y Osman Chávez conforman esta agrupación. Además, son parte del grupo el extitular de la Secretaría de Salud, Rubén García, Tomás Ramírez Hernández, la reconocida bailarina Ashanty Crisanto, incluyendo sus respectivos suplentes, quienes son garífunas. De las ocho organizaciones políticas integradas dentro del CN, en cinco de ellas hay congresistas negros, donde Brooks, Crisanto y Bermúdez fueron las mujeres que obtuvieron la mayor cantidad de votos dentro de sus partidos en Francisco Morazán durante el pasado proceso electoral.
Aunque no se sientan en una misma fila de curules dentro del salón de sesiones, estos legisladores pasan en constante comunicación dentro y fuera del hemiciclo legislativo, evidenciando que su camaradería va más allá de los colores políticos por los cuales resultaron electos. En múltiples ocasiones se ha reunido la bancadita “Afroh” para trabajar en una agenda de temas inclusivos y que beneficien a los suyos por considerar que los han marginado a lo largo del tiempo. Contrario a las otras bancadas, en este grupo no hay jefes ni subjefes, mucho menos un mando vertical u horizontal, sino que todos sus miembros son escuchados de forma equitativa y brindan aportes sin imposiciones de ningún tipo.
Priorizar agendas
“La bancadita Afroh tiene como objetivo incidir para priorizar en las agendas de los diferentes poderes del Estado, especialmente en el Legislativo temas que permitan el desarrollo de nuestras comunidades que históricamente han sido olvidadas”, manifestó a EL HERALDO, la doctora Bermúdez.
Agregó que “tenemos claro que nuestra función como diputados es el bien común, las necesidades son comunes; continuamos luchando por más y mejores condiciones de vida, más oportunidades de participación sobre todo visibilización porque no pedimos nada, solo trato igualitario”. En el marco del pasado mes de la herencia africana en el país, los diputados de esta bancadita introdujeron proyectos en pro de sus raíces.
Una iniciativa orientada a reformar por adición el artículo seis de la Constitución de la República presentó Ashanty Crisanto, añadiendo que el Estado reconocerá y protegerá la pluriculturalidad, el uso de idiomas ancestrales de los pueblos indígenas y afrohondureños en los territorios donde habitan. Mientras que Ramírez expuso un proyecto para la creación de una ley que impulse la participación equitativa de los pueblos étnicos y negros. A través de una moción que fue aprobada se instó para que las empresas contraten al personal por su conocimiento y aptitudes para diferentes puestos sin discriminación de raza, sexo, preferencia sexual y que los afrodescendientes reciban un trato igualitario.
La proposición fue presentada por el parlamentario suplente del Pinu, Rolando Benedith.
Con optimismo y buen humor, los congresistas afrohondureños están enfocados en seguir luchando desde el CN para fomentar mejores condiciones para sus pueblos y se deje atrás la exclusión de su gente.