Tegucigalpa, Honduras
El Hospital Escuela Universitario (HEU) realizó en las últimas horas una importante adquisición que le permitirá ahorrarse varios millones de lempiras al año.
El Servicio de Medicina Transfusional del HEU adquirió una moderna 'centrifuga refrigerada'.
Esta maquina permite triplicar la capacidad del centro asistencial para el procesamiento de componentes de la sangre.
La jefa del área, Criselda Elvir expresó que 'de la sangre total de 12 unidades podremos -a la vez- fraccionar componentes, es decir, plaquetas, plasma fresco congelado, glóbulos rojos y crío precipitado'.
Anteriormente, el HEU disponía de una máquina fraccionadora de sangre con una capacidad de apenas 4 unidades de sangre.
Desde hace casi dos años el centro asistencial dejó de comprar a la Cruz Roja Hondureña derivados de la sangre lo que se traduce en un ahorro mensual hasta de un millón de lempiras.
Los hemoderivados como el plasma se transfunde a pacientes con sangrados y quemaduras, el crío precipitado para recién nacidos y adultos con sangrados -al actuar como anticoagulante- y las plaquetas en pacientes oncológicos.
La maquina de última generación tuvo un coste de un millón 700 mil lempiras y se adquirió con fondos propios del centro asistencial.
El Hospital Escuela Universitario (HEU) realizó en las últimas horas una importante adquisición que le permitirá ahorrarse varios millones de lempiras al año.
El Servicio de Medicina Transfusional del HEU adquirió una moderna 'centrifuga refrigerada'.
Esta maquina permite triplicar la capacidad del centro asistencial para el procesamiento de componentes de la sangre.
La jefa del área, Criselda Elvir expresó que 'de la sangre total de 12 unidades podremos -a la vez- fraccionar componentes, es decir, plaquetas, plasma fresco congelado, glóbulos rojos y crío precipitado'.
Anteriormente, el HEU disponía de una máquina fraccionadora de sangre con una capacidad de apenas 4 unidades de sangre.
Desde hace casi dos años el centro asistencial dejó de comprar a la Cruz Roja Hondureña derivados de la sangre lo que se traduce en un ahorro mensual hasta de un millón de lempiras.
Los hemoderivados como el plasma se transfunde a pacientes con sangrados y quemaduras, el crío precipitado para recién nacidos y adultos con sangrados -al actuar como anticoagulante- y las plaquetas en pacientes oncológicos.
La maquina de última generación tuvo un coste de un millón 700 mil lempiras y se adquirió con fondos propios del centro asistencial.
