Las Fuerzas Armadas (FF AA) reconocieron ayer que uno de los exmilitares hondureños capturados en México, por entrenar a la banda criminal de Los Zetas, perteneció al cuerpo armado. El portavoz militar, Jeremías Arévalo, dijo que Carlos Alfredo Herrera Gómez, de 21 años, formó parte de la base Naval de Castilla, de donde se desertó y fue imposible capturarlo para castigarlo por el delito de deserción.
Del otro involucrado, Róger Iván López Dávila, de 44 años, no se tiene ningún registro de que haya sido parte de las FF AA, dijo el portavoz.
Los hondureños, según el diario Universal, de México, fueron capturados por la Policía en el municipio de Cadereyta, Nuevo León, por estar entrenando “en guerrilla urbana” a un contingente de la temida banda de Los Zetas, que comete todo tipo de delitos, desde secuestros hasta asesinatos.
Esta banda estuvo vinculada a carteles de la droga pero aparentemente se independizó para cometer por su cuenta las fechorías. “En efecto, uno, Carlos Herrera Gómez, ingresó a la Base Naval de Castilla, en ese entonces estuvo casi un año, de ahí se desertó, cometió un delito de deserción y se va del país”, dijo el portavoz de las FF AA.
“No encontramos en los registros de Personal de las diferentes fuerzas del Estado Mayor Conjunto, Fuerza Aérea, Naval y Ejército a la otra persona”.
