TEGUCIGALPA, HONDURAS
En las mochilas de la gran mayoría de ellos no solo hay cuadernos, lápices y libros. Sus bolsos rebalsan de sueños, metas, ilusiones y ganas de conquistar el mundo; de ser alguien en la vida.
En las aulas de clases de los kínderes, las escuelas, los colegios y las universidades se perciben fácilmente el esfuerzo, la dedicación, los desvelos, las alegrías, las tristezas y los resultados. Todo en una sola mezcla de sentimientos.
Cada 11 de junio, Honduras conmemora el Día del Estudiante. Son alrededor de 2.2 millones de niños y jóvenes los que mañana lo conmemorarán recordando el nacimiento del padre José Trinidad Reyes. Es en su memoria que el país honra esta celebración.
Ejemplo
El “padre Trino”, como también se le conoce al ilustre y letrado hombre, nació el 11 de junio de 1797.
Fue fundador de La Sociedad del Genio Emprendedor y del Buen Gusto, el 14 de diciembre de 1845, y tiempo después, con el apoyo de presidente Juan Lindo, inauguró la primera universidad publica del país, que actualmente es la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Como aportes a la cultura escribió varias pastorelas, reconstruidas por Rómulo Ernesto Durón, las cuales son las primeras manifestaciones teatrales en Centroamérica, y cuya representación de las mismas estableció los cimientos en Honduras para la posterior aparición del teatro.
Retos
El sistema educativo tiene en frente diversos retos por superar. Algunos de ellos van desde la infraestructura educativa, las deserción escolar, la falta de maestros y hasta la carestía de materiales didácticos.
Según cifras de Educación, solo el año anterior, aproximadamente fueron 52,000 mil estudiantes los que abandonaron las aulas de clases.
En algunos de los casos el abandono escolar en el área rural se debe a la baja cobertura educativa mientras que en la zona urbana se debe, en parte, a los niveles de inseguridad.
Vea: Así visten las estudiantes de la UNAH
Engranaje educativo
En el país hay 23,000 mil centros educativos de primaria y secundaria.
En el nivel superior cuenta con 20 universidades, seis públicas y 14 privadas.
Se estima que anualmente en educación media se gradúan alrededor de 60,000 estudiantes de las diferentes carreras y modalidades.
Sin embargo, de ellos solo hay disponibles un promedio de 11,000 puestos para ellos en las universidades públicas.
Cambios
El sistema educativo del país ha venido atravesando algunos cambios y transformaciones. Uno de ellos fue en la educación primaria y secundaria con el sistema de evaluación continua, el índice de aprobación del 70 por ciento y otros cambios en la currícula nacional.
El Día del Estudiante fue considerado fecha cívica para los hondureños, bajo acuerdo gubernamental con fecha 28 de mayo de 1922.
Ellos son estudiantes ejemplares:
1. Dulce Taylor: 'Mi mayor deseo es poder ayudar y orientar'
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Dulce Taylor es una estudiante de la carrera de Educación Especial de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM).
Ella tan solo tiene 21 años y fue su juventud la que la impulsó a salir de su natal Siguatepeque, en Comayagua, para venir a la capital y convertirse en la mejor de las profesionales. Ella también es maestra de educación secundaria y con el apoyo de su madre, con la mochila cargada de sueños y una sed por cumplir su objetivo llegó a la capital.
Ingresó a la UPNFM en 2015 y desde los primeros meses cursando su carrera destacó por su entrega y compromiso, razón que la llevó a ser una estudiante becada.
“Considero que (su carrera) es una necesidad para el país porque trabajamos con personas que más lo necesitan y no solamente con ellos sino que con quien desee una ayuda educativa”, dijo.
Con tan solo tres años de estar en la universidad, Taylor está próxima a graduarse y es la alumna con el promedio más alto dentro de su carrera.
Su pasatiempo favorito es la lectura de libros que tengan que ver con la que dentro de muy poco será su profesión. Recuerda que desde su niñez se inclinó por la docencia, debido a la gran responsabilidad que conlleva esa carrera.
El deseo más grande de Dulce es “ayudar y orientar cuando en una escuela se presenten dificultades de aprendizajes, necesidades educativas especiales y alguna discapacidad. Mi trabajo va a ser asesorar a los centros educativos a que mejoren sus servicios a las personas con y sin discapacidad”.
Dulce espera poder acceder a una beca para estudiar una maestría orientada a la pedagogía. Como una estudiante muy aplicada la definen sus catedráticos y sus compañeros como una líder en clases.
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2. Denis Aguilar: 'Quiero luchar, seguir y ayudar a la gente'
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Por los pasillos de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) camina un joven con determinación y una sonrisa en su rostro. Es Denis Aguilar, un estudiante no vidente de la carrera de Periodismo.
Denis recuerda con hilaridad que en su inicio no sabía qué estudiar. La carrera que más le gustaba era Derecho, pero con el tiempo fue descubriendo que lo suyo era el periodismo.
“En mis inicios me costó encontrar el norte, porque me distraía en mis clases” con el pasar de los períodos académicos se convenció que su vocación radicaba en el periodismo.
Según Denis, “la infancia de un niño ciego no es fácil y más cuando uno es de tierra adentro, mi ventaja es que tengo una hermana mayor que es ciega, entonces mis papás ya sabían qué hacer conmigo”.
Este joven estudió en una escuela especial para ciegos donde pasó sus primeros seis años de educación primaria. Según Denis, su momento mas difícil fue cuando entró a secundaria, a una escuela secular, donde el primer año no tuvo ningún amigo.
Después de culminar su carrera desea laborar como periodista de investigación. “Sabemos que afuera la competencia es grande, pero tenemos la confianza de luchar, seguir adelante y ayudar a la gente en lo que se pueda; mi mayor deseo es hacer de la información un bien social”.
Durante los últimos años, Denis ha sido becario de la máxima casa de estudios por su dedicación, compromiso y sus buenas calificaciones.
Denis agradece a los avance tecnológicos porque por medio de ellos ha podio estudiar por los diferentes lectores de pantallas, asimismo las grabadoras digitales han sido su apoyo durante su carrera estudiantil.
Denis define su carrera como “una actividad profesional que tiene que recolectar, procesar y dar la información”.
3. Marllory Sánchez: 'Más que el mejor índice, lo que quiero es aprender'
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Con el promedio más alto de Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), en Tegucigalpa, se encuentra Marllory Sánchez López, estudiante de la carrera de Derecho, quien ya es graduada de Ingeniería Química.
Marllory es conocida por sus compañeros como una estudiante carismática, respetuosa y entregada a sus estudios. Afirma que desde pequeña fue una estudiante dedica y comprometida.
Su pasatiempo favorito es leer, porque considera que es así como puede enriquecer sus conocimientos.
Ha sido una joven multifacética, representó internacionalmente al país como deportista en clavados, con lo que ganó diferentes medallas, desde bronce hasta oro.
Asegura que su amor por la carrera nace por su mamá, quien es abogada y desde pequeña le inculcó su amor por las leyes. “Estudio derecho porque considero que se complementa con mi primer carrera, además nadie puede alegar desconocimiento de la ley”.
En el futuro espera desarrollarse en al área del derecho civil o mercantil, ya que son las que más le pueden ayudar con su primer carrera.
“Tener el mayor índice para mí no es de emoción, porque me interesa más aprender que una nota”, asegura la joven estudiante.
Sin duda, su mayor anhelo es poder estudiar muchas carreras más, ahondar en el mundo de la ciencia y crear su propia empresa. Define a su carrera como “el estudio de las leyes que va acompañado de disciplina, responsabilidad y honestidad”. Dice que “no todo en la vida es como se espera hay momentos que estudiar no es suficiente para lograr su objetivo”.
En un futuro espera ser una mujer con múltiples títulos universitarios y poder ser de ayuda para el país.
4. Susy Reyes: 'He aprendido a superarme a mí misma'
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“He aprendido a superarme a mí misma, a conocer hasta dónde puedo llegar, soy persistente y perseverante”, así se definió Susy Vanesa Reyes Figueroa, de 30 años de edad.
Susy es pasante de la carrera de Medicina en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH). La estudiante dice que “no todo es color de rosa, ser médico no solo es andar la bata blanca o todos los aparatos que anda un doctor, sino que es dedicación, cansancio, perseverancia, y algunos momentos de alegría”.
Todas las emociones acumuladas, especialmente el estrés y la preocupación, la llevaron a pasar el momento más duro en su vida personal y profesional.
Comenta que el día en que realizó su examen final presentó una crisis de migraña, que le produjo una hemorragia interna en su cabeza y que desembocó en un aneurisma cerebral y tuvo que ser intervenida quirúrgicamente.
Relata que nunca perdió la fe en que podría salvarse y fue ese el momento en que a Susy Reyes le tocó luchar por su vida, ella asegura que “yo nunca me sentí sola, siempre supe que Dios estaba conmigo”.
Los médicos que la atendieron consideran que fue un milagro que estuviera viva, comúnmente las personas que presentan esta condición pierden el habla o la movilidad motriz de su cuerpo.
Autoridades de la universidad le ofrecieron equivalencia para el cambio de carrera, pero ella, rotundamente, contestó con un “no”.
La inspiración fundamental fueron sus papás y hermanos que fielmente la apoyaron y creyeron en sus capacidades, así es como actualmente Susy está por egresar y espera viajar para poder especializarse en medicina alternativa.
El mensaje de Susy para los estudiantes es “enfrenten cada situación y día a día pongámonos nuestros guantes para pelear por nuestra vida”.
