Tegucigalpa, Honduras
Los cambios en el sistema de evaluación de los estudiantes de primaria y secundaria del país ya están listos y a partir del mes de agosto las cosas serán más estrictas en el salón de clases.
Desde hace cinco años, los alumnos pasan sus asignaturas con un 70 del 100 por ciento de nota. Los puntos son distribuidos en 70 puntos de acumulativos en clase y en casa y 30 puntos de exámenes y evaluaciones.
Una fuente ligada a la Secretaría de Educación confió a EL HERALDO las modificaciones que se hicieron a la distribución de puntaje para evaluar a los estudiantes.
La distribución, se estima, quedará de la siguiente manera: en el caso de los estudiantes de educación primaria, los exámenes tendrán un puntaje de 40 puntos, las tareas en la casa tendrán un valor de 30 puntos y los trabajos en clase un valor de 30 puntos.
Mientras que para el nivel secundario, las cosas se pondrán más “duras”, puesto que ahora los exámenes y las pruebas tendrán un valor académico de 50 puntos, dejando las tareas dentro del aula en 30 puntos y las asignaciones del hogar en 20 puntos.
La decisión de aplicar este nuevo modelo a partir del mes de agosto, es porque así los estudiantes estarán iniciado el tercer parcial.
Para el caso, las escuelas bilingües que tienen sistema estadounidense sí comenzarán un nuevo año académico bajo nuevas reglas, puesto que sus clases inician en agosto.
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Cambios
Las modificaciones en la evaluación se dieron luego de que un estudio hecho por la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM) revelara que la distribución 70-30 no estaba dando los resultados que la sociedad y la Secretaría de Educación esperaban.
En ese informe quedó evidenciado que los estudiantes tienen serias deficiencias en las materias de español y matemáticas. Por ejemplo, el Informe Nacional de Rendimiento de este año dice que hay un “estancamiento” en la obtención de conocimientos de los alumnos.
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Reacciones
La ministra de Educación, Rutilia Calderón, afirmó que los cambios que se hagan tendrán que hacerse no solo a nivel de la evaluación, sino de la impartición de clases.
“Hemos aprendido a ver el aprendizaje a través de una calificación, los cambios que se hagan deben hacerse para mejorar”, dijo la funcionaria.
Es decir que también habrá cambios a nivel de docentes, los cuales serán instruidos para que apliquen de manera correcta el modelo de evaluación continua.
Además, tendrán que renovar la distribución del puntaje en los trabajos y tareas, para evitar que el uso del Internet sea el único recurso que los estudiantes utilicen para ganarse la calificación.
Los cambios dependen de cada asignatura: UPNFM
Mejorar el rendimiento de los estudiante en el país no será una tarea fácil, puesto que esa meta depende de todos los actores del sistema educativo. Así lo considera el vicerrector de Educación a Distancia de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), José Darío Cruz.
“Podemos poner el 90-10 o el 80-20 y nada va a cambiar si los cambios no van en función de la naturaleza de las clases, no es lo mismo evaluar una clase de Filosofía que una de Química”, manifestó el académico a EL HERALDO. Es decir que el puntaje del examen y de los acumulativos debe variar según la clase.
“Es necesario que se revise cada clase, porque si es un taller, por ejemplo, se le debe dar un mayor puntaje a la parte práctica y evaluar algo mínimo en el examen”, explicó Cruz.
Comentó que para que el rendimiento mejore es necesario capacitar a los docentes para que sepan cómo se debe evaluar al estudiante, más allá de poner una calificación.
“Hay que ser francos en que, cuando un alumno se queda no es únicamente la responsabilidad del alumno, a los maestros se nos paga por enseñar y que el alumno aprenda”, dijo.
Añadió que es necesario que las autoridades educativas encuentren un mecanismo para que los padres de familia se involucren en el proceso de enseñanza.
“No se trata de que el padre de familia le haga la tarea a los alumnos, lo que se quiere es que se involucren y estén pendientes de la educación de los estudiantes”.
