Tegucigalpa, Honduras
La Comisión Especial para el proceso de Transformación y Depuración de la Policía Nacional prepara una propuesta para el presidente de la República, Juan Orlando Hernández, entorno a quiénes dirigirán la nueva cúpula policial.
Este trabajo lo harán los comisionados Vilma Morales, Omar Rivera y Alberto Solórzano, junto al secretario de Seguridad Julián Pacheco Tinoco.
La gran aspiración no solo de la Comisión de Depuración sino de toda una sociedad es revitalizar el liderazgo de la institución.
En ese sentido, se tendrá que evaluar entre los primeros niveles de la oficialidad más alta quiénes tienen condiciones para asumir la riendas de la policía.
Entre ellos se encuentran los tres generales, Félix Villanueva, Quintín Júarez y Héctor Iván Mejía. Asimismo, se suman 22 comisionados, para un total de 25 altos oficiales.
“Dentro de ese grupo vamos hacer un esfuerzo para seleccionar a quienes van a conducir la Policía”, dijo a EL HERALDO una fuente ligada a la Secretaría de Seguridad.
Los puestos más importantes son la Dirección General, la Subdirección y la Inspectoría General de la Policía.
En pocas palabras, los 25 altos oficiales se disputan los principales puestos de la institución.
EL HERALDO conoció que a lo interno de los generales y los comisionados surgen nombres para poder ocupar la cúpula policial.
Se trata del general Héctor Iván Mejía, actual enlace entre Policía Nacional de Honduras y la Organización de los Estados Americanos (OEA) en Washington.
Los comisionados Elvis Javier Cantarero, actual inspector general, y Orbin Galo Maldonado, actual director de Recursos Humanos.
Asimismo, en la lista figuran dos comisionados que recientemente fueron ascendidos: Leonel Sauceda, actual director Nacional de Vialidad y Transporte, y Orlin Javier Cerrato, actual director de Inteligencia Policial.
“No hay duda de que (quienes) tienen mejores condiciones para estos cargos son los generales o los comisionados, como para asumir ese reto. Lo lógico sería que ellos pudieran asumir esa responsabilidad”, expresó la fuente.
Está claro que a nivel de los generales es muy poco probable que alguno pueda ser considerado para ese cargo.
“Félix Villanueva ya se va y no hay planes de ratificarlo en el cargo, Quintín Juárez ya se fue y Héctor Iván Mejía se encuentra en misiones diplomática en Washington”, indicó la fuente.
Sin embargo, es potestad del actual mandatario tomar la determinación de ratificar a Villanueva en el cargo o en su defecto nombrar a Mejía en el puesto.
“Si analizamos a los tres generales no tienen condiciones para asumir ese cargo”, indicó la fuente.
Comisionados
En un segundo nivel se encuentran los comisionados y es de aquí de donde saldrían los nuevos líderes de la institución.
“Dentro de los 16 comisionados las condiciones de ellos para asumir las riendas de la Policía son bastantes debilitadas, no existe un ambiente entusiasta para que ellos asuman”, aseguró la fuente.
Aunque no se puede descartar tengan posibilidades para asumir los altos cargos de la institución.
Aquí figuran los comisionados José Amílcar Mejía, Osman Fabiel Díaz, Roger Medrano Maradiaga, José David Aguilar, José Francisco Blanco Ulloa, Roger Osmín Bardales, Ramón Banegas, Wilmer Danilo Marthel, Ramón Adalberto Martínez, Mario Roberto Sevilla López y Doris Andrea Flores.
Asimismo, los recién ascendidos Wilfredo Maradiaga Oseguera, Félix Adrián Colindres, Lázaro Fredis Lagos, Manuel Antonio García, Miguel ángel Amaya y Carlos Adonay Rivera.
La fuente aclaró que todos ellos fueron evaluados por la Comisión Depuradora el año anterior y pasaron todas las pruebas de confianza.
Dijo que para ese tipo de posiciones se ocupa una actitud dinámica e innovadora.
“Hasta en el mismo interior de la Policía no ven en ellos el futuro liderazgo de la institución, por lo que las posibilidades de ellos son reducidas para la mayoría”, indicó.
“Donde se encuentra el potencial es en los comisionados recién ascendidos que son ocho y los actuales subcomisionados”, dijo la fuente informante ligada a Seguridad.
Disyuntiva
Aunque actualmente en el interior de la misma Policía Nacional y la Secretaría de Seguridad existe la gran disyuntiva de si le apuesta “a un severo y radical relevo generacional y colocamos un proceso de transición con uno, dos o tres de los 16”, indicó.
Eso es lo que se está discutiendo en la actualidad.
Sin embargo, en el interior de la Comisión de Depuración le apuestan a que la cúpula policial sea conformada por oficiales jóvenes con una alta calidad de formación.
De acuerdo a la fuente, la Policía necesita sangre nueva para limpiar los errores del pasado.
La Comisión, igual que como hizo con los ascensos, va a iniciar un proceso de recertificación entre los 25 oficiales.
Esto significa que se hará un exhaustivo análisis en cada un de los perfiles de los altos oficiales.
La finalidad es actualizar sus datos con los diferentes operadores de justicia.
Asimismo, se actualizará el resultado de todas las pruebas de confianza, es decir que se les volverán a aplicar a los generales, comisionados y subcomisionados, a fin de garantizar la idoneidad de cada uno de ellos.
En este momento la depuradora trabaja en identificar cuáles son los potenciales miembros de la nueva generación y cuáles son los posibles de la nueva generación que pudieran tener oportunidad de quedarse.
La disputa se encuentra entre los 16 comisionados antiguos, los 8 comisionados que ascendieron y uno de los generales, para un total de 25 altos oficiales.
En el interior de la institución existe una denominación coloquial y es que a los recién ascendidos los han calificados como “Los Peluches”.
La Comisión enviará una propuesta al presidente para que él pueda escoger una nueva cúpula.
El presidente puede escoger los tres o en su defecto todo el directorio organizacional de la institución policial.
Oficialmente, tanto Villanueva como Juárez tienen posibilidades, porque finalmente es el mandatario quien decide quién asume el liderazgo de la institución.
La principal discusión a lo interno de la Comisión está entre respetar la tradición y antigüedad o en su defecto apostarle a un relevo generacional para transformar de una vez la institución.
Lo que sí queda claro es que la nueva estructura de la Policía estará conformada por nuevas generaciones.
El actual jefe policial Félix Villanueva concluye su mandato de tres años en el mes de noviembre, pero el presidente Hernández tiene la última palabra al respecto.
Depuradora busca con lupa a los nuevos líderes de la Policía
Omar Rivera, miembro de la Comisión Especial para la Depuración y Transformación de la Policía Nacional, reveló que el principal reto que se tiene en este momento esta instancia es identificar “los futuros líderes policiales que darán sostenibilidad a la reforma institucional que se está gestando en los diferentes organismos de la entidad; andamos identificando los nuevos campeones de la Policía Nacional”.
“Andamos buscando con lupa los líderes que conducirán la Policía Nacional la próxima década; a los que van a liderar una policía depurada y transformada” exteriorizó.
Rivera, quien es miembro de la Alianza por la Paz y la Justicia (APJ), manifestó que la Comisión Especial busca dejar instalado un “liderazgo eficiente, legítimo y honesto” al frente de la Policía Nacional e identificada esa cúpula que volverá concreto “el relevo generacional que revitalizará los diferentes organismos policiales”.
La Comisión trabaja intensamente para recertificar a los miembros de la alta oficialidad, incluidos los recién ascendidos para verificar su idoneidad para asumir responsabilidades de conducción y liderazgo.
“Los integrantes de los niveles superiores de la oficialidad serán sometidos a evaluación de desempeño y de confianza, y determinaremos que no tienen cuentas pendientes con la justicia y el Estado, y de entre los que tengan mejor perfil vamos a escoger la nómina que propondremos al Presidente de la República, ya que es él quien tiene la última palabra”.
“No basta con que egresen más de 3 mil quinientos nuevos agentes de escala básica del Instituto Tecnológico Policial cada año y hagan engrosar la nómina policial a lo largo y ancho del territorio nacional, también necesitamos altos oficiales de elevado quilataje profesional y de irreductible calibre moral a fin de garantizar la adecuada conducción de la Policía Nacional”, dijo el depurador.
“Es importante el nombramiento de oficiales de excelencia que conduzcan la policía actual, que cuenta con 14 mil agentes y un presupuesto de 6 mil millones de lempiras”, indicó Rivera.