El gobierno hondureño propuso que se le concedieran 7.8 millas de las 18 que mide la bocana del Golfo de Fonseca
por tener mayor espacio en la línea costera, en la reunión que los presidentes de Honduras, Nicaragua y El Salvador sostuvieron en Managua para discutir el manejo de la porción de esta ensenada que no está delimitada.
EL HERALDO, único medio de comunicación hondureño presente en el encuentro presidencial, conoció que el ofrecimiento fue planteado por las autoridades nacionales como punto de partida para las negociaciones.
Repartición
De concretarse esta pretensión, El Salvador y Nicaragua tendrían que repartirse las 10.2 millas restantes de la bocana.
Este segmento que pide Honduras es proporcional al porcentaje de la línea costera que tiene el país en el golfo y esa fue la base de la propuesta, confió la fuente.
La ribera del golfo mide 261 kilómetros, de los que 185 le pertenecen a Honduras (un 51 por ciento); Nicaragua 47 kilómetros (30 por ciento); y El Salvador 29 (18 por ciento).
La propuesta hondureña está basada en algunos elementos que “implícitamente” indica el derecho internacional sobre la materia del territorio.
“El derecho internacional no aplica a bahía, sino a mar abierto, pero tampoco dice que no se puede aplicar” y este planteamiento “no es nada tirado de los cabellos”, explicó la fuente a EL HERALDO.
“Como hay que negociar, es preferible ceder algo que no es mío a lo que es mío”, acotó la fuente. Los presidente de Honduras, Porfirio Lobo; el de Nicaragua, Daniel Ortega; y de El Salvador, Mauricio Funes, sesionaron en Managua para discutir la repartición de los sectores no delimitados en la sentencia que emitió en 1992 la Corte Internacional de Justicia de la Haya. La reunión se efectuó en La Casa de los Pueblos, sede del Poder Ejecutivo.
El fallo estableció que los tres estados ribereños tenían
derecho a ejercer soberanía en una distancia de tres millas desde el inicio de sus playas a lo largo de sus respectivas líneas costeras.
La zona económica exclusiva, la plataforma continental y mar territorial tenían que ser manejadas mediante cosoberanía y los espacios en la bocana (acceso al océano Pacifico) mediante una negociación. Otra opción que analizaba presentar Honduras es que la negociación sobre la zona de cosoberanía se hiciera de forma separada con El Salvador y Nicaragua.
El Salvador asegura que Honduras no tiene salida al Océano Pacifico por la bocana del Golfo de Fonseca, lo que ha generado algunos roces diplomáticos y hasta militares.
Propuesta equitativa
Los anteriores espacios de delimitación ofrecidos por Honduras fueron consignados en un documento presentado la semana pasada a los gobiernos de El Salvador y Nicaragua para que fuera el punto de partida de las pláticas.
En el documento se afirma el derecho de soberanía a tres millas para cada nación en la bocana y se indican los puntos donde inician y terminal esas líneas divisorias.
Esta es la primera vez que se presenta un mapa con divisiones de las zonas no delimitadas en el golfo luego de 20 años de haberse emitido el fallo de la Corte Internacional de Justicia.
En la reunión también participaron el canciller Arturo Corrales y el asesor de la Cancillería, Carlos López Contreras por parte de la contraparte hondureña.