Honduras

Las expectativas por la reforma migratoria aumentan el flujo

“La expectativa es que va ganar Hillary Clinton y que viene la reforma migratoria y que todo el mundo que esté en Estados Unidos será parte del indulto o la reforma migratoria”, explicó Puerta

31.07.2016

Tegucigalpa, Honduras
Estados Unidos está a solo meses de cambiar de presidente y las campañas políticas que refieren a una reforma migratoria incrementan la esperanza de los hondureños y con ello la motivación de emprender la ruta.

Esto a criterio del experto en fenómeno migratorio Ricardo Puerta, quien aseguró que esta es una de las causas por las que crece el flujo de migrantes, ya sea niños o adultos. “La expectativa es que va ganar Hillary Clinton y que viene la reforma migratoria y que todo el mundo que esté en Estados Unidos será parte del indulto o la reforma migratoria”, explicó Puerta.

Sin embargo, advirtió que aun cuando gane Hillary Clinton para que exista una reforma migratoria se debe llevar un debate en el primer año, además de tener el apoyo del partido Republicano, “porque de lo contrario no hay reforma”.

“La expectativa significa ‘yo tengo que estar en Estados Unidos para poder ser beneficiado con la reforma’, lo cual no es del todo cierto porque si ponen una fecha no van a poner la fecha de hoy, ni la del día antes en que van hacer la reforma, a lo mejor lo ponen qué se yo... en 2015 o lo que sea”, comentó el experto.

Puerta señaló que hay otras dos causas por las que el flujo continúa: una de ellas es que con la crisis migratoria de 2014 la gente comprobó que podían enviar a los menores con un coyote y abandonarlos en la frontera para que estos se entregaran a las autoridades.

Aseguró que en el caso de los hondureños, se sigue utilizando este método amparados siempre en la ley vigente de 2008, que impide la deportación inmediata de los menores que ingresen solos a ese país.

La tercera razón a criterio de Puerta tiene relación con el tema de la reunificación familiar de los hondureños que fueron amparados por el Estatus de Protección Temporal (TPS), quienes ahora prefieren llevarse a sus hijos que rondan entre los 16 y 18 años.

“Les sale más negocio llevarse a esos menores al hogar nuevo en Estados Unidos y ya no mandarles remesas y con ese dinero pagarle al coyote”, aseguró.

Dijo que en estos casos los jóvenes van a trabajar a Estados Unidos y se convierten en un nuevo ingreso para la familia