TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los próximos meses que restan de 2024 estarán cargados de lluvias que, en algunos casos, podrían duplicar las precipitaciones que caen normalmente, la situación pone en incertidumbre a los agricultores nacionales.
De acuerdo los pronósticos del Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), actualmente el territorio se encuentra influenciado por el período de canícula, que significa una disminución de las lluvias.
Sin embargo, este año la canícula será débil y corta, finalizando a mediados de agosto, y posteriormente se espera que las precipitaciones sean de casi el doble a las que normalmente se presentan durante agosto.
Francisco Argeñal, director de Cenaos, dio a conocer las perspectivas climáticas para los próximos meses del 2024 y reveló que agosto será un mes con lluvias por arriba del promedio en casi todo el territorio, seguido de septiembre y octubre con lluvias parecidas al promedio o un poco más.
“Agosto no es un mes tan lluvioso, pero este año en vez de tener de 90 a 100 milímetros en promedio de lluvia durante ese mes vamos a tener 200 milímetros”, dijo.
Los pronósticos por zonas establecen que a finales de agosto y los primeros días de septiembre habrá bastantes precipitaciones en la parte sur y oriente del país.
“En zonas como el Distrito Central, Yuscarán, Choluteca, San Marcos de Colón, en Pespire, Nueva Armenia, Maraita, Sabanagrande, es decir, casi todo Francisco Morazán, en Comayagua, Lamaní y en la Villa de San Antonio, ahí esperamos lluvias casi el doble de lo que normalmente llueve en un año normal en agosto”, detalló.
Para la última semana de agosto el paso de un ciclón tropical cerca de las costas del Caribe puede dejar bastante entrada de humedad, lo que significa lluvias más intensas.
Pronóstico por mes
Mientras que para septiembre las proyecciones climáticas indican que las lluvias serán parecidas al promedio en casi todo el territorio, exceptuando regiones como El Paraíso y parte de Olancho donde las condiciones serán menos que el promedio.
“Septiembre es bastante lluvioso y en la zona de El Paraíso que llueva un 20% menos no significa ninguna amenaza para ningún cultivo; pero si tendremos un exceso de lluvia a lo largo de la costa en Colón desde Balfate hasta Trujillo, con una probabilidad que tengamos lluvias cerca de un 41% hasta 80% arriba del promedio”.
En el resto de la zona Atlántica y parte de Colón las precipitaciones van estar entre el 20% a 40% arriba del promedio durante septiembre.
Para el mes de octubre las lluvias en el occidente serán un poco por debajo del promedio, entre un 40% hasta 20% menos de lluvias en algunas zonas de Santa Bárbara, Copán, Ocotepeque y Lempira.
Esas condiciones representan buenas noticias para los pobladores del Valle de Sula, pues no se espera crecimiento elevado de los los ríos crezcan, añadió el director de Cenaos.
Para noviembre la probabilidad es que las lluvias estén por arriba del promedio, lo que sumado a la interacción de masas de aire frío con sistemas tropicales de al temporada podrían dejar bastante precipitación, especialmente en el Caribe.
En ese mes se esperan que las lluvias sean de un 20% o 40% arriba del promedio.
En general los pronósticos revelan que los próximos meses serán bastante lluviosos en el país, “tendremos lluvias copiosas a finales de agosto con algún escenario de temporal, otro posiblemente a mediados de octubre y otro a finales de noviembre que puede repercutir en la producción agropecuaria nacional”, afirmó el experto.
Hizo un llamado a los agricultores a tomar las medidas de prevención para evitar las afectaciones de sus cultivos
Incertidumbre
Las proyecciones que reveló el meteorólogo para los próximos meses preocupa a los agricultores, quienes en los últimos años se han visto afectados por los efectos del cambio climático.
Juan Valladares, productor de maíz en la zona de Olancho solo ha logrado sembrar el 60% de su tierra, debido a las lluvias que cayeron en la zona en los meses de junio y julio, y al conocer cuáles serán las condiciones para los siguientes meses su preocupación crece.
”La cosecha de maíz esta prevista para octubre, por lo que si es un mes de bastante lluvia nos pone en incertidumbre de cómo saldrá la cosecha, pues al haber bastante agua en el suelo la calidad del maíz se pierde y ya no se puede comprar a la industria de la harina”, dijo.
El campesino expresó que cada vez sembrar se hace más difícil por el tema climático.
”Cuando hay sequía nos enfrentamos a la falta de sistemas de riego para garantizar la siembra, y cuando llueve en exceso no se termina de germinar el maíz o la cosecha no es de calidad, por eso cada ves son menos los productores que estamos sembrando”.
Ante la lamentable situación los productores piden mayor asistencia por parte de las autoridades gubernamentales para hacerle frente al cambio climático.
”Estamos preocupados los productores y con otra perdida sería el acabose para muchos”, dijo Valladares.
Concluyó que en zonas de Olancho como el Valle de Guayape, Lepaguare y en el valle de Agalta. muchos productores de granos básico no han logrado sembrar por completo, pues las lluvias constantes en esa zona no lo han permitido.
