Los miembros de la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih) instaron este jueves al Tribunal Superior de Cuentas (TSC) a finalizar y presentar las auditorías patrimoniales realizadas a elementos de la Policía Nacional.
Un aspecto que preocupa a esta cuerpo anticorrupción es el enriquecimiento ilícito de los oficiales, por lo que exhortaron al 'Tribunal Superior de Cuentas que presente y termine las auditorías', expresó Juan Jiménez Mayor, vocero de la Maccih.
Jiménez Mayor brindó estas palabras en una comparencia de prensa después de finalizar una reunión entre los integrantes de la Misión de Apoyo y Comisión Especial para la Depuración Policial.
En el encuentro se compartió información sobre el mecanismo que utiliza el grupo para sanear la institución policial de elementos corruptos, luego que EL HERALDO y The New York Times revelaron la participación de la cúpula policial del 2009 en el asesinato del zar antidrogas, Julián Arístides González.
Sobre este trabajo de depuración, Jiménez calificó que 'es un proceso que va a tomar meses y serán decisiones difíciles'.
Sin embargo, 'hay que hablar claro en el país, creo que el proceso que esta conduciendo este grupo de ciudadanos, de ciudadanos valientes'.
La Maccih cumplió esta semana un mes de haberse instalado en el país. Durante este tiempo, el trabajo se ha concentrado en el proceso de instalación y fijación de mecanismos de selección de personal.
Por su parte, Omar Rivera, miembro de la Comisión, mencionó que la Maccih se convirtió en un aliado valioso en la reestrucción del cuerpo policial.
'El apoyo técnico para identificar patrones de conducta ilítica de policías y desmantelar redes corruptas conformadas por agentes de oficiales es algo que la Comisión Especial espera recibir de la Maccih', dijo el depurador.
Separados
La última decisión fuerte de la Comisión Especial consistió en la cancelación de 30 subcomisionados y la suspensión temporal de otros seis oficiales de igual rango por estar bajo investigación.
Anteriormente, el equipo separó a 23 comisionados y tres generales de la Policía Nacional, por lo que el total de elementos apartados y suspendidos asciende a 68, de un total de 164 evaluados.
EL HERALDO dio a conocer este jueves que oficiales ligados a las maras se han convertido en el principal obstáculo en la depuración, debido a que los miembros temen represalias si los separan, según una fuente de entero crédito.
La comisión está conformada por el coordinador de la Asociación por la Paz y la Justicia (APJ), Omar Rivera; el presidente de la Confraternidad Evangélica de Honduras, Alberto Solórzano; la integrante de la Comisión Interventora del Instituto Hondureño de Seguridad Social, Vilma Morales; y el ministro de Seguridad, Julián Pacheco Tinoco, quien la preside.
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