TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El Centro Hondureño para el Niño Quemado (Cehniq) informó ayer que las atenciones por niños quemados aumentaron en un 22% en este 2023, en comparación al 2022.
Así lo informó el portavoz de Cehniq, Alfredo Ortiz, quien indicó que el año pasado se atendieron al menos 399 emergencias de menores quemados.
Mientras que, en lo que va el 2023, se han reportado más de 400 casos, según las cifras proporcionadas por Ortiz.
Agregó que las regiones más afectadas por niños quemados son Francisco Morazán con el 50% de las incidencias, luego sigue Olancho que tiene un 11%, les continúa El Paraíso con un 8%, la región de Comayagua tiene el 5% de los casos y Choluteca el 4%.
Asimismo, la institución manejada por la Fundación del Niño Quemado (Fundaniquem) ha reportado cuatro menores quemados por pólvora desde noviembre del presente año.
El último caso que reportó fue el pasado 14 de diciembre y se trataba de un niño de 7 años de edad, quien tuvo fuertes quemaduras en su mano y cara por un mortero.
De acuerdo con las declaraciones de Ortiz, el menor era procedente de La Paz e ingresó a la sala de emergencia del centro asistencial.
Las autoridades les hacen un llamado a los padres de familia que no les compren pólvora a sus hijos.