Tegucigalpa, Honduras.- La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, ha enfrentado fuertes críticas de la oposición y miembros de la sociedad civil tras su reciente discurso en la 79’ Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU).
Entre los principales detractores se encuentra Salvador Nasralla, exdesignado presidencial y actual precandidato del Partido Liberal, quien cuestionó la capacidad de Castro para interpretar los datos presentados en su discurso, sugiriendo que la mandataria “solo lee lo que le ponen” y que su participación en la ONU expuso al país al ridículo.
Nasralla calificó el discurso como un intento fallido por mejorar la imagen del gobierno.
Por su parte, la diputada liberal Maribel Espinoza criticó que Castro no mencionara la posibilidad de restablecer el Tratado de Extradición con Estados Unidos, cuya terminación se anunció en septiembre. Espinoza señaló que la omisión de este tema dejaba sin valor el discurso de la presidenta.
Desde la sociedad civil, Gabriela Castellanos, directora ejecutiva del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), afirmó que el gobierno de Castro manipula la opinión pública, utilizando narrativas de golpes de Estado para consolidar su poder y justificar acciones autoritarias. Castellanos también acusó a la administración de emplear tácticas de control de la información y censura a medios no afines.
La diputada del Partido Nacional, María Antonieta Mejía, también se sumó a las críticas, calificando el discurso de la presidenta como vacío y centrado en el golpe de Estado de 2009, sin mencionar los logros de su administración.
A pesar de las críticas, seguidores de Castro defienden su intervención como una oportunidad para destacar los desafíos que enfrenta Honduras y los esfuerzos de su gobierno por combatir la violencia y reducir la pobreza.
