TEGUCIGALPA, HONDURAS.-La emergencia sanitaria por el covid-19 no ha impedido a una veintena de políticos de las fuerzas mayoritarias hacer encuentros virtuales, negociaciones y hasta proselitismo mediante ayudas solidarias en una carrera contra el tiempo a 102 días de la convocatoria a elecciones primarias.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) ya está trabajando para convocar el 13 de septiembre al pueblo a elegir a los candidatos a cargos de elección que en las generales se disputarán los 3,016 cargos disponibles.
Los partidos Nacional, Libertad y Refundación (Libre) y Liberal son los únicos que han anunciado su participación en los comicios del 14 de marzo. Nuevos rostros han incursionado en estos quehaceres políticos. El empresario Roberto Contreras, en plena crisis de coronavirus, anunció: “He decidido postularme como presidente de Honduras”.
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Días antes distribuyó videos en los que se le veía regalando gallinas y pollos y más antes cuestionó la falta de políticas públicas que fueran capaces de aminorar los costos por los servicios básicos.
La presidenta del Colegio Médico de Honduras (CMH), Suyapa Figueroa, tampoco quiere quedarse atrás. Ya insinuó su interés de participar en política y, según fuentes médicas, ya tuvo acercamientos con Luis Zelaya, presidente del Partido Liberal.
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Figueroa y Contreras revelaron su interés de inscribirse en las planillas del Partido Liberal, pero antes tienen que resolver su militancia. “Se requiere un mínimo de afiliación de cuatro años, ser de reconocida solvencia moral y de destacada militancia partidaria”, dicen los estatutos del partido fundado en 1891.
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No sería extraño que en las planillas también aparezcan algunos médicos que han tenido protagonismo mediático en esta crisis de coronavirus.
El presentador de televisión, Salvador Nasralla, también pretende sumarse a la corriente de Luis Zelaya, ya sea a titulo personal o mediante una alianza con su Partido Salvador de Honduras (PSH) cuya inscripción aún resuelve el CNE. Pero antes Zelaya deberá ganar las primarias.
En el partido de gobierno las cosas parecen claras. Hay dos corrientes: una coordinada por Mauricio Oliva y la otra por Nasry Asfura y las dos parece que tienen la venia del presidente Hernández. En plena crisis sanitaria, Oliva recibió la adhesión del designado presidencial Ricardo Álvarez. Porfirio Lobo se desligó y anunció su adhesión a un bloque opositor.
