Tegucigalpa, Honduras
Por los delitos de lavado de activos y posesión ilegal de armas comerciales y armas prohibidas fue acusado Arnaldo Urbina Soto, alcalde nacionalista del municipio de Yoro, departamento del mismo nombre.
Según el Ministerio Público, el lavado de activos lo habría cometido durante varios años, logrando acumular una riqueza que no concuerda con sus ingresos mensuales.
Mientras que la tenencia de armas se comprobó durante el allanamiento realizado el domingo, encontrando en su vivienda y en la de sus dos hermanos, armas de grueso calibre, entre ellas fusiles AK-47, M-16, escopetas, pistolas automáticas y armas tipo revólver.
En las lujosas residencias, valoradas en varios millones de lempiras, también encontraron municiones para diferentes tipos de armas, indumentaria de uso militar, chalecos antibalas, teléfonos satelitales, entre otro tipo de evidencias.
En las investigaciones realizadas por la Fiscalía contra el Crimen Organizado, Dirección de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN) y la Policía Militar, el alcalde junto a sus hermanos: Carlos Fernando, Mario Roberto y Miguel Ángel, estos dos últimos detenidos durante los allanamientos, comenzaron a mostrar sus riquezas a partir de 2009, razón por la cual las investigaciones se incrementaron para determinar el origen del dinero.
A los hermanos también se les investiga por su presunta responsabilidad en actividades de narcotráfico, ya que en sus viviendas se encontraron generadores de energías y extensiones con focos, similares a las utilizadas en los aterrizajes de las narcoavionetas.
Inocente
Al llegar a los juzgados con Jurisdicción Nacional de San Pedro Sula, el alcalde yoreño declaró: “Soy inocente en los temas que se me imputan, creo que ha sido un show mediático, soy una persona trabajadora, luchadora, una persona que los pocos bienes que tengo los he obtenido lícitamente, que los he obtenido de la herencia de mis padres, que en paz descansen”.
“Yo soy un alcalde reelecto por un segundo período consecutivo, con una diferencia de casi 12 mil votos con el contendiente más cercano, y no creo que eso haya sido por hacer un mal trabajo, ese resultado fue por un buen trabajo y una enorme labor que estoy desarrollando en mi municipio, pero si eso es un pecado, creo yo que se está cometiendo una injusticia con mi persona, se está cometiendo algo que no es correcto, pero igual, están los tribunales para dirimir”, agregó.
El alcalde dijo que mantendrá su frente en alto porque es una persona inocente “y no acepto ningún cargo de los que se me están imputando”, enfatizó.
Cae mexicano
Junto al alcalde de Yoro, las autoridades detuvieron al mexicano Santiago Meraz (50), originario de san Luis, Potosí.
Según informes de las autoridades, el mexicano era empleado del alcalde y era el encargado de organizar los palenques, ya que en la propiedad encontraron 250 gallos de pelea, además del palenque para observarlas.
Informaron que en los palenques participan personas de diferentes sectores del país, quienes en la casa del funcionario municipal decidían en qué lugar se realizaría la próxima pelea de gallos.
También se investiga la permanencia del extranjero en el país, por lo que pedirán a la Dirección de Migración y Extranjería un informe de su estatus migratorio.
El mexicano, junto al alcalde, sus dos hermanos y otros dos empleados permanecían ayer en la Primera Estación de la Policía Nacional en San Pedro Sula, en donde se redobló la seguridad para evitar cualquier intento de fuga, informaron las autoridades, ya que los sospechosos habrían comentado “saldremos pronto”.
Ostentosos lujos
En los allanamientos las autoridades pudieron confirmar los lujos en cada una de las residencias de los “Urbina Soto”, una banda familiar dedicada a extorsiones, secuestros, sicariato, violaciones y a la apropiación forzada de propiedades, según el Ministerio Público.
Cada casa cuenta con piscina, extensos patios con animales exóticos, entre ellos avestruces y papagayos o guaras.
En los potreros se encontraron decenas de cabezas de ganado, de los cuales se investiga su propiedad.
Al interior se pueden observar acabados en madera tallada en las áreas de sala, comedor, habitaciones, en el bar y en salones externos de la casa.
La propiedad del alcalde también cuenta con una laguna.
Los lujos con que viven los sospechosos parecieran no tener límites; una de las habitaciones cuenta con un clóset que no tiene nada que envidiarle a una tienda, ya que en sus ganchos solo hay ropa de marca y varias cajas guardan zapatos nuevos y de marca.
En la cocina, uno de los muebles guardaba un set de cucharas, tenedores y cuchillos fabricados en plata con detalles en oro.
En el encielado se aprecian detalles en madera de color y lujosas lámparas.
Banda criminal
Según las investigaciones realizadas por el Ministerio Público, los hermanos habrían obtenido todos los lujos hace más de cinco años, cuando Arnaldo Urbina Soto comenzó su accionar delictivo en actividades de narcotráfico.
Mientras que sus hermanos eran los encargados de reclutar a personas armadas que brindaran seguridad al momento del aterrizaje de narcoavionetas y en el traslado de la droga a otras zonas del municipio.
También se les supone responsables de apropiarse de casas, terrenos y ganado, en el caso en que las personas se negaran a entregárselas eran asesinadas, indica el informe.
Según la Fiscalía, el alcalde se mofaba de cometer crímenes: “Tengo en mi lista 137 muertos ya sepultados y 45 desaparecidos”, cita el informe como una expresión del edil.
En los antecedentes investigados por el MP se establece que la banda de los “Urbina Soto” proviene de una familia “sanguinaria”, ya que sus padres estuvieron ligados a asesinatos.
Supuestamente, su madre estuvo presa por el delito de asesinato, mientras que su padre, que también fue alcalde de ese municipio, fue asesinado por los familiares de una persona que habría asesinado.
Fernando, el único que no fue capturado durante los allanamientos, estuvo recluido en el centro penal de Olanchito, Yoro, por el delito de asesinato, pero logró escapar.
Cuando su hermano se convirtió en alcalde, habría logrado acuerdos para resolver su situación legal, según el informe.
OABI no tiene bienes
La Oficina Administradora de Bienes Incautados (OABI), a través de un comunicado de prensa, informó ayer que “no ha tomado posesión de los bienes correspondientes, en virtud de que los allanamiento son parte de un proceso de investigación complejo, debiendo el Ministerio Público presentar los indicios para solicitar el aseguramiento de los mismos y proceder a su inscripción en los registros y en última instancia solicitar la incautación de los mismos, y luego la toma de posesión de los bienes por parte de esa oficina.
“Finalmente se hace del conocimiento general que la OABI se encuentra pendiente y preparada para realizar la recepción material de los bienes correspondientes, una vez que se realice el proceso legal de mérito por parte de los entes investigadores, fiscales y jueces”, indica el boletín de prensa.