TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La rabia bovina es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta al ganado, representando un riesgo para esta industria y para los humanos que también pueden resultar contagiados.
Es producida por un virus, el cual se caracteriza por ser grave y mortal, ya que afecta al sistema nervioso central y las glándulas salivales, además provoca la inflamación del cerebro y de la médula espinal de forma aguda y progresiva.
La prevención se lleva a cabo con la vacuna antirrábica, que debe aplicarse anualmente y es fundamental para asegurar la salud de los bovinos, evitar pérdidas masivas en la granja y controlar la transmisión a humanos.
Por lo general la enfermedad se manifiesta en un tiempo de 1 a 3 semanas, aunque puede extenderse hasta 2 o 3 meses, tiene un progreso muy rápido, el primer día pueden comenzar con la pérdida del apetito y al cuarto o quinto ya se encuentran recostados, sin mencionar que la muerte ocurre alrededor del décimo día, posterior al comienzo de la manifestación.
¿Cómo se transmite?
La rabia bovina se transmite principalmente a través del contacto directo con animales infectados, como murciélagos, zorros y otros mamíferos salvajes que portan el virus de la rabia.
La infección puede ocurrir a través de mordeduras, arañazos o contacto de la saliva infectada con heridas abiertas en el ganado. También se ha registrado la transmisión de la rabia bovina por medio de objetos contaminados, como cercas o herramientas utilizadas en el manejo del ganado.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas de la rabia bovina pueden variar, pero generalmente incluyen:
1. Cambios en el comportamiento: El ganado infectado puede mostrar agresividad, nerviosismo excesivo o cambios repentinos en su temperamento habitual.
2. Dificultades neurológicas: Los animales pueden experimentar debilidad, falta de coordinación, parálisis en las extremidades o problemas para comer y beber.
3. Cambios en la vocalización: El ganado puede emitir sonidos anormales, como gemidos o balidos inusuales.
4. Hipersalivación: Los animales pueden babear de forma excesiva debido a la dificultad para tragar.
Es importante destacar que estos síntomas son indicativos de varias enfermedades, por lo que se recomienda buscar asesoramiento veterinario en caso de sospecha de rabia bovina.
¿Cómo prevenir la enfermedad?
La prevención de la rabia bovina es fundamental para proteger la salud del ganado y evitar la propagación de la enfermedad. Algunas medidas de prevención incluyen:
1. Vacunación: La vacunación regular del ganado contra la rabia es crucial. Se recomienda seguir el programa de vacunación establecido por los servicios veterinarios locales y asegurarse de que todas las vacunas estén actualizadas.
2. Control de vectores: Es importante implementar medidas de control de vectores para reducir la exposición del ganado a animales salvajes portadores del virus. Esto puede incluir la eliminación de refugios para murciélagos en las instalaciones ganaderas y la implementación de cercas adecuadas para evitar el contacto directo con animales salvajes.
3. Buenas prácticas de bioseguridad: Mantener instalaciones limpias y desinfectadas, así como asegurar una buena higiene personal y del equipo utilizado en el manejo del ganado, ayuda a prevenir la transmisión de enfermedades, incluida la rabia bovina.
La identificación temprana de los síntomas y la atención veterinaria oportuna son cruciales para mitigar el impacto de la rabia bovina en el ganado y proteger la salud del rebaño, así como de la comunidad.