TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Golpeados por una recesión económica mundial y un ambiente político convulso, no se avizora el mejor panorama para la hondureñidad y de acuerdo con las iglesias, debe de priorizarse en el bien común y no en particulares.
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El sacerdote Carlos Rubio, vicario de la Parroquia Nuestra Señora de la Visitación, es del criterio que “no hay duda que el panorama mundial y nacional se ve con situaciones adversas, pero dependerá de las decisiones correctas que se tomen en bien del país y del bien común.
Según Rubio, serán imprescindibles “los acuerdos políticos, económicos y la buena gestión que pueda hacer el gobierno para mejorar; creo que aquí se requiere el concurso de todas las fuerzas del país para enfrentar esta situación que está afectando a nivel mundial”.
Precisó: “De las sabias decisiones que se tomen para generar empleo, lo que tiene que ver con la justicia y que sea un país de puertas abiertas para la inversión, eso va a permitir un mejor panorama económico, si no se llega a grandes acuerdos, sin duda el panorama va a ser más sombrío”.
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Honduras se levantará
“Creemos y tenemos fe que Honduras se va a levantar, creemos en esta nación, que puede ocurrir un milagro en este país; pero viéndolo fríamente como vemos este país en este momento, no le vemos un norte”, expresó Gerardo Irías, presidente de la Asociación de Pastores Evangélicos de Tegucigalpa.
Señaló: “Vemos la misma política de siempre, con una presidenta y un gobierno que todavía no es de beneficio para el país”. El religioso sentenció que “lo que le espera al país en 2023, si seguimos de esta manera, es un caos terrible; seguimos agudizando la pobreza, hospitales sin medicinas y sin generar empleos” .
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