Tegucigalpa, Honduras. La experiencia de Nicaragua bajo el régimen de Daniel Ortega es una advertencia contundente para los hondureños, aseguró el general en retiro Romeo Vásquez Velásquez, exjefe de las Fuerzas Armadas.
El oficial retirado, y hoy un reconocido político, detalló que Ortega manipuló a la clase empresarial, ofreciendo beneficios económicos y un diálogo engañoso para consolidar su poder.
“Una vez que el dictador se fortaleció, los traicionó: empresarios perseguidos, encarcelados o exiliados, y empresas destruidas o confiscadas. Honduras enfrenta actualmente una amenaza similar”, advirtió.
De acuerdo con Vásquez Velásquez, Honduras llama a la clase empresarial a unirse al esfuerzo para evitar la consolidación de un régimen totalitario socialista, vinculado a la narcopolítica y a la corrupción.
“La indiferencia solo asegura un destino similar al de Nicaragua, donde los intereses personales de unos pocos prevalecen sobre el bienestar colectivo. Por eso es imprescindible la defensa de la democracia y de las instituciones, así como el unir fuerzas con la sociedad civil para frenar el autoritarismo”, manifestó.
El militar retirado llamó a la ciudadanía a rechazar pactos que comprometan la independencia económica, así como a respaldar liderazgos patrióticos y éticos comprometidos con el desarrollo nacional.
A criterio del exjefe castrense, el futuro de Honduras está en juego. La lección de Nicaragua debe encender una alarma: actuar con valentía y compromiso es la única vía para un país libre, próspero y justo.
Para consolidarse en el poder, el régimen dictatorial de Ortega y de su mujer, Rosario Murillo, en los últimos años ha mantenido una ofensiva contra todos sus críticos, llevando al cierre de medios de comunicación, persiguiendo, encarcelando y expulsando a los académicos, a los periodistas, a los poetas, a los defensores de derechos humanos y hasta los religiosos.
