Tegucigalpa, Honduras
Un apretón de manos al salir de su primera reunión oficial como nuevo representante de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Honduras selló la promesa de Igor Garafulic de conceder a EL HERALDO su primera entrevista en el país.
Ese encuentro ocurrió hace casi un mes, cuando los representantes del G-16 se reunieron con la Misión Exploratoria de la ONU para hablar sobre el diálogo nacional.
Tres semanas después el imponente acceso a la Casa de las Naciones Unidas en Honduras le daba la bienvenida al equipo de EL HERALDO. Minutos después, ya en un salón de juntas donde destacaban la bandera de Honduras al lado derecho y la de la ONU al izquierdo, la puerta se abrió e ingresó Garafulic.
Vestido de saco y pantalón negros, una nítida camisa blanca, corbata rosada y luciendo orgulloso un pin de la ONU, comenzó su diálogo con EL HERALDO sobre los acercamientos y avances que se han tenido en el tan anhelado diálogo nacional. A continuación sus impresiones:
¿Sus primeras tres semanas en Honduras, cómo han sido?
Han sido intensas. He podido conversar con muchos actores, así que siento que ya tengo una buena radiografía de cómo está mi tema, que es el diálogo político. Después ya voy a ver cómo logro hacer una visita más extensa al territorio y ver qué tantas cosas podemos hacer en Honduras, pero de momento mi foco de reuniones y contactos han tenido que ver con impulsar el diálogo político.
¿Estaba al tanto, antes de ser nombrado, de la situación actual del país?
Como tú ves, mi acento es chileno, estoy trabajando desde hace muchos años con Naciones Unidas y mi última destinación inmediatamente antes de venir era en Guatemala, entonces yo seguí muy de cerca todos los procesos que se estaban dando en Honduras, antes de la elección, durante y después que se me dio está designación de venir a trabajar a Honduras.
La experiencia que yo traigo tiene mucho que ver con lo que conozco de la región, con los últimos cuatro años que estuve trabajando en “Guate”.
¿Es el momento de que el diálogo nacional deje de ser un discurso?
El momento es el que yo siento que tienen que darse los propios hondureños, como que el gran mensaje es que los procesos de diálogo no los puedes forzar porque sino pasan a ser algo artificial, siempre va buscando otras razones cuando no es genuino.
Yo siento que el minuto para el diálogo va a ser cuando las partes realmente quieran sentarse alrededor de una mesa y para ese minuto es el apoyo que Naciones Unidas quiere dar, está preparado para dar y eso significa que todos los que lleguen a esa reunión van a llegar a un espacio amigo, neutro, nosotros como Naciones Unidas vamos a asegurar que todas las posiciones sean escuchadas en igualdad de condiciones y para eso hay técnicas de diálogo, expertos que garantizan que esto sea más que una conversación.
Ese conocimiento lo tiene ONU, y Naciones Unidas también tiene la capacidad y la fuerza para pedir, si es que los hondureños nos piden algunos mediadores, nosotros hacer de puente comunicarnos con ellos decirles que sus opiniones son bienvenidas, que son necesarias para Honduras.
¿Tendrán esos mediadores la disposición de venir a Honduras?
Sí, pero sobre todo, esto es muy importante resaltar, que esos mediadores van a estar dispuestos a venir en la medida que sientan que son bienvenidos, de consenso y aceptados porque ellos son todos grandes nombres que han hecho cosas importantes por sus países y, seguramente, van a estar dispuestos a venir, pero sabiendo que son aceptados por las partes, entonces nuestras mesas de diálogo cuando arranquen tienen que partir de que todos los interesados acepten a los mediadores.
¿Hay voluntad interna de parte de los actores?
Yo he visto que ha habido una evolución positiva de los distintos actores, les quiero recordar, y por qué digo esto, vino una misión exploratoria, yo los acompañé y tuvimos 25 reuniones y desde esas reuniones han pasado dos semanas y yo creo que lo que cambió, y es importante decirlo, es que se pensaban que esta misión eran los mediadores.
Segundo, y lo más importante, se pensaba que desde afuera se iban a imponer condiciones o se iba a dirigir un diálogo y yo creo que en este minuto, y luego de dos semanas y con el informe de esa comisión que salió muy rápidamente, y eso hay que felicitar a los que hicieron el informe, ellos reconocieron que aquí, hoy, no existía un diálogo.
A la ONU se le pide venir a apoyar un diálogo político y lo que la misión observa es que el diálogo no existe, ahí es diferente como uno sigue y avanza porque lo que la misión hace es bueno, nosotros podemos hacer recomendaciones para que las distintas partes se acerquen en la mesa.
¿Ya existe una lista de posibles mediadores?
Lo que se mantiene es que los nombres que acuerden los hondureños, que lleguen a la mesa, Naciones Unidas va a hacer el máximo esfuerzo por conseguir que vengan porque en este momento están los nombres de Ernesto Zedillo, Vinicio Cerezo, José Mujica, Félipe González, Baltasar Garzón, Michelle Bachelet y Leonel Fernández, sin embargo, para que nosotros podamos contactarlos y pedirles que apoyen a Honduras, esta lista debe reducirse, quizá no a uno, que exista un equipo.
Un criterio podría ser que vinieran de a dos, o si políticamente para el país que existan tres es una solución, nosotros estamos con la obligación, así nos sentimos, que esos nombres acepten, ofrecerles tranquilidad y condiciones de trabajo a esos mediadores, pero los que reducen la lista de siete a tres son los miembros de la mesa, cuando se sienten ahí y nosotros vamos a hacer nuestro trabajo.
¿Hay voluntad de estos mediadores, los contacto ya la ONU?
Yo, responsablemente, tengo que decir que tan pronto veo cada uno de estos nombres he contactado a estas personas para conocer cuál es su disposición, cuáles son sus condiciones para venir a trabajar, sin embargo lo de nosotros es un sondeo, para también ser realista y cuando se establezca la mesa poder decirles: miren, estos nombres no son realistas porque tienen otro compromiso, otra mediación, otras funciones.
Porque, de momento, para ser claro, estos son nombres surgidos de los actores políticos hondureños, esos nombres deben achicarse y proponerse oficialmente a la ONU y, entonces, como esto no puede ser un diálogo y no queremos que sea un diálogo eterno, no queremos que sea que se quede en proceso.
Es que, claro, todos los países, todos, distintas embajadas, me han ayudado a sondear, pero todos ellos dicen en el minuto que nos hagan una petición formal, lo consideraremos, pero lo que además me dicen todos es que esos nombres van a venir en la medida que se sientan invitados y bienvenidos al país.
¿Se podría decir que estas personas están dispuestas a venir a trabajar en el diálogo nacional?
Todos esos nombres tienen muy buena disposición para trabajar y apoyar al pueblo de Honduras.
¿Entonces no se debilitó el diálogo cuando los actores principales de la oposición decidieron no reunirse con la misión exploratoria de la ONU?
Las delegaciones que vinieron de la Alianza de Oposición eran de alto nivel, diputados del Congreso Nacional, y lo que hicieron fue exponer los planteamientos que tenía la Alianza, eso fue la primera semana de febrero, sin embargo, en la semana siguiente personalmente me reuní con Salvador Nasralla y Manuel Zelaya, por lo tanto, ellos están informados de cada una de las cosas de este informe y, por lo tanto, creo que el ciclo de consultas con los actores políticos relevantes está bien cubierto.
¿Deben bajar el ímpetu en las peticiones que realizan para dialogar los actores políticos hondureños?
Yo creo que todos tienen voluntad de dialogar y creo que todos entienden que tienen que ser flexibles, esa es la impresión que me han dejado.
¿Qué posturas ha encontrado hasta el momento de las partes?
Todos reconocen que hay una necesidad de tocar temas que tienen que ver con los aspectos políticos centrales, pero todos son muy buenos hondureños y patriotas en el sentido de que reconocen que el país está necesitando reformas grandes, cada uno de los actores, que también incluyo a la sociedad civil, todos ellos son conscientes de que el país tiene desafíos más amplios en el área económica, protección social, pero todos son realistas y entienden que hay un problema político que hay que resolver primero, entonces la iniciativa que arranque, cuando arranque, porque todavía no hay un diálogo con fecha establecida de inicio, cuando arranque yo lo visualizo como un diálogo amplio que dé cuenta de las necesidades del pueblo hondureño.
¿Cuál sería el porcentaje de avance por ahora respecto al diálogo nacional?
Yo diría que todos los procesos de diálogo tienen momentos positivos y oportunidades que hay que aprovechar, yo siento que después de tres semanas de haber estado en el país con todos los actores, que durante las próximas semanas podrían acercarse las posiciones y que estamos pasando por uno de esos momentos en que vamos acercándonos en la mesa, si tuviera que poner esto en una figura en una imagen, los que tienen que llegar a un diálogo tienen que llegar a una mesa, las sillas estaban muy lejos de esa mesa y yo siento que esta semana (la semana pasada) se ha producido un avance y hay que ser optimistas en que las sillas se sigan acercando y podamos tener una mesa de diálogo.
¿Se acepta el diálogo vinculante por la partes?
Yo creo que las partes y en esto, digo, todas las partes están interesadas en que lo que se acuerde, después se cumpla, por lo tanto, como hay malas experiencias anteriores, todos los sectores quieren asegurarse que lo que ahí se hable ahí se cumpla.
Esa es la famosa palabra para que la gente cuando escuche vinculante, en buen chileno (risas), a lo que llegue como acuerdo después te lo cumplan eso, por lo tanto, ha estado desde mi reunión número uno a la 40 en Honduras.
No hay un sector que no me diga que lo que no quieren es ir a perder el tiempo, es no ir a dilatar, que están dispuestos a sacrificar horas de trabajo, esfuerzo, estudio pero ellos aspiran a que no sea una vez más en que no se cumplió en lo que diga.
¿El tema de los derechos humanos es prioridad?
Yo siento que en todos los sectores el tema de los derechos humanos ha estado presente en todas las conversaciones que he tenido, tengo que ser justo y decir que preocupa la atención por los derechos humanos tanto en mis reuniones con la oposición como con el gobierno, yo no sería sincero y no sería directo si no dijera que he observado preocupación por el tema de los derechos humanos en todas las partes.
¿El financiamiento cómo va a ser?
Hay que destacar que todo el mundo sienta que está entrando a una mesa a un lugar ecuánime, neutro y esa casa ofrece Naciones Unidas, aquí los fondos que se necesiten para financiar el diálogo se van a conseguir y aportar desde la Naciones Unidas para que nadie sienta que esto es un diálogo pagado por un sector o por otro, sepan que si aquí hay que desplazarse para ampliar el diálogo a los distintos departamentos, quienes convocan, como se establece una mesa en distintas zonas, esto se hace a nivel departamental, esos costos que no son tan altos pero sí es importante que todo mundo sepa que no está llegando a un lugar que ha sido financiado por un sector u otro, esa es la importancia política de contar con una independencia económica, política, para que todos se sientan en terreno neutro.
¿La crisis que se vivió después de las elecciones ya pasó?
Yo siento que hay problemas políticos que deben resolverse, y que esta mesa va a ayudar a mejorar la convivencia, por supuesto, uno hace etapas en este proceso en el que la crisis ha estado más alta, pero esto es un proceso que está evolucionando y en este momento yo diría que la etapa es mejorar la convivencia y que esta mesa puede aportar a mejorar la convivencia en Honduras.
Las 7 reconocidas figuras internacionales
Recomendaciones de la ME de la ONU han permitido avanzar
El informe que presentó la misión exploratoria de la ONU contiene una serie de recomendaciones que se han implementado para preparar el terreno para iniciar el diálogo nacional.
Igor Garafulic, representante de la ONU en Honduras, destacó que se debía comenzar a disminuir el nivel de las descalificaciones entre los actores políticos.
“Ninguna negociación o diálogo arranca si se están ofendiendo el uno al otro”, dijo.
Resaltó que es importante aclarar mediante una comisión y en torno a la verdad las muertes ocurridas después de las elecciones. “Ningún sector puede negarse a aclarar algo tan serio”, argumentó Garfulic.
Explicó que en el pasado ya ha habido muchos acuerdos que no se cumplieron, entonces debe existir “un compromiso que lo que se va acordar, se cumpla”.