TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El alcalde de San Marcos de Colón, Choluteca, Douglas Ordóñez, no sabía que en su municipio estaba instalada una Zona de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE) hasta la semana pasada que escuchó al presidente Juan Orlando Hernández referirse públicamente a ella.
“Para nosotros fue una sorpresa, esto se viene manejando desde hace años. Un grupo de alcaldes donde se iban a colocar las ZEDE fueron a Singapur, a Hong Kong. Fue el alcalde de Nacaome, de Amapala, de San Lorenzo y según tenía entendido El Triunfo también iba a ser un lugar para una ZEDE. San Marcos de Colón no estaba destinado, hasta ahora que ya empezaron con la construcción”.
Este proyecto no ha sido socializado, ni se le ha tomado en cuenta a la alcaldía, pues “como le repito, nosotros no sabíamos que aquí se iba a construir una ZEDE”.
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La empresa Agroalpha, que se acoge a la modalidad antes mencionada, se instaló como lo hicieron normalmente otras que llegaron a invertir en el municipio, pero “de repente le dieron el giro como ZEDE de poco acá”.
“A mí nadie me ha comunicado que es una ZEDE, solo lo que hemos escuchado del Presidente en varias intervenciones que ha tenido, pone de ejemplo a San Marcos de Colón”, sostuvo Ordóñez.
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División
La opacidad y el manejo jurídico con que las autoridades del gobierno vienen implementando esta forma de inversión tiene actualmente divididas a las poblaciones y corporaciones municipales tanto de San Marcos de Colón, Choluteca; y de Choloma, Cortés; como Roatán, Islas de la Bahía, lugares seleccionados a nivel nacional para tal fin.
El temor a que el país sea enajenado y entregado en pedazos de territorios —donde las municipalidades y el Estado ya no tendrán control— se percibe en las autoridades locales y en la ciudadanía, que no deja de expresar su miedo a que estos sitios se vuelvan reductos donde en medio de los sanos inversionistas se mezclen capitales mal habidos y que al mismo tiempo se vuelvan refugios de narcotraficantes, de lavadores de activos y de otro tipo de delincuentes.
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“Es que no sabemos qué tipo de inversionistas llegarán”, reflexionó Ordóñez.
El anuncio de Hernández de que en San Marcos de Colón ya se estaba instalando una ZEDE rápidamente fraccionó a los miembros de la municipalidad, unos a favor, otros en contra.
Hay concejales que tienen cierta desconfianza, pero la aceptan por la promesa de generación de empleos; otros se muestran totalmente en contra al enterarse que, según la Ley Orgánica de las ZEDE, se tratarán de pequeños enclaves con su propia legislación, su propio sistema financiero, sus propios jueces, policías, sistema educativo, de salud y forma de vida, sin control de las autoridades municipales y del mismo Estado.
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ZEDE
Agroalpha es la empresa que se desarrolla actualmente en la comunidad de Las Tapias, San Marcos de Colón, bajo la modalidad de ZEDE. El lugar está situado a unos ocho kilómetros del casco urbano del municipio. Se trata de un pequeño valle en la carretera hacia Duyure, El Paraíso. En el sitio existe una pequeña población, proveniente de un grupo campesino organizado que se asentó ahí hace aproximadamente 48 años, en el tiempo de Oswaldo López Arellano.
Agroalpha comenzó sus trabajos de instalación hace unos cinco meses, no obstante, desde hace más de ocho años en esta comunidad vienen operando otras empresas agrícolas como Agripac y Caribean, dedicadas a producción de calabazas y chile de exportación, mientras que los pobladores por su propia cuenta se dedican a la siembra de granos básicos.
Agroalpha actualmente es un proyecto en desarrollo, unos ocho guatemaltecos supervisan a unos 200 trabajadores hondureños que laboran en la construcción de un gigantesco invernadero para el cultivo de hortalizas, entre ellas chiles de color, destinadas para el mercado extranjero.
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De acuerdo con los registros municipales, esta compañía posee alrededor de 300 manzanas de terreno propio y tiene planificado el uso de unas 170 para el cultivo. Además de los invernaderos —casa malla, dicen los ingenieros— también trabaja en la construcción de lo que será su planta procesadora.
Esta empresa pagó en la alcaldía la tasa ambiental y el permiso de construcción, o sea para la remoción de tierra y levantamiento de infraestructura, pero le falta cancelar el permiso de operación, sostuvo el alcalde de San Marcos de Colón.
En el sector de Las Tapias, la mayoría de la gente no tiene mayor información de las ZEDE, nadie les ha llegado a hablar de ella; algunos han escuchado noticias, como Juan Antonio Escalante, quien da a conocer su temor de que con el tiempo no solo existe el riesgo de que sean expropiados de sus terrenos, sino que el agua subterránea, de la cual se abastecen mediante pozos perforados, desaparezca.
“Aquí nadie nos ha venido a consultar sobre la instalación de esa empresa, es que los políticos aquí vienen solo cuando andan en campaña, una vez ganan o pierden desaparecen”, criticó Escalante.
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Otra empresa
El movimiento laboral en el sector de Las Tapias está en crecimiento ya que a unos metros de los predios de Agroalpha también hace un mes comenzó a instalarse la empresa Vallyfresh, cuyo rubro también es la producción de chile. La diferencia es que esta compañía no se ampara en la Zona de Empleo y Desarrollo Económico, según Lenín Andino, ingeniero del proyecto.
Actualmente esta empresa realiza remoción de escombros en un predio de ocho manzanas, alquilado para producir chile de color. Es inversión hondureña, se trata de una sociedad de tres inversionistas, dijo Andino.
“Nosotros estamos pagando todo a la alcaldía, nos supeditamos a las leyes nacionales”. No están bajo la protección de la modalidad ZEDE. “Aquí será solo una producción y venta nada más. Nosotros ya operamos en el valle de Comayagua. Nosotros a nivel nacional buscamos dónde es lo más óptimo para producir chile de colores y esta es la zona que tiene la menor presencia de la mosca, que es la que afecta el cultivo, además el clima es el adecuado, por eso es que decidimos operar acá”, añadió Andino.
De acuerdo con el alcalde de San Marcos de Colón, en la Corporación Municipal en un principio estaban de acuerdo porque viene a generar mano de obra. Sin embargo, los regidores de la oposición ahora están en contra, “ahora hay una división, mientras que la ciudadanía desconoce el tema. Realmente no sabemos a futuro qué es lo que va a pasar”, meditó el edil.
