TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Tres meses es el tiempo estimado en que la mayoría de la población hondureña se contagió por covid-19.
Las olas de contagios, picos o rebrotes, son períodos de incrementos significativos de casos después de que las incidencias se mantuvieran bajas.
El aumento puede producirse por varios factores: porque ya paso la inmunidad de la antigua ola, las personas se relajaron con las medidas de bioseguridad o porque surgió una nueva variante del virus.
Actualmente el país paga las consecuencias de estos tres factores juntos. Según un análisis de EL HERALDO de las cifras oficiales de la Unidad de Vigilancia de la Secretaría de Salud (Sesal), en este 2022, las olas de contagios por covid-19 han durado tres meses, un mes más que la inmunidad misma que solo dura dos meses.
+Regístrese aquí para seguir disfrutando el periodismo de valor
La primera ola se reportó entre enero, febrero y marzo; la segunda llevó la misma secuencia, duró el mismo tiempo (junio, julio y agosto).
Las estadísticas pronostican que este tercera ola durará el mismo tiempo (diciembre, enero y febrero).
Para febrero las mayoría de la población se habrá contagiado y obtendrá inmunidad colectiva, la cual, según la secuencia, dura solo dos meses.
+Honduras sufrirá una tercera ola de contagios por covid-19 en diciembre y enero
Reforzar medidas
Las hospitalizaciones, muertes y los casos están aumentando en el país. Entre 100 a 200 incidencias se reportan cada dos días, después de que se presentaban menos de 50 casos a nivel nacional.
“En este momento la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y la Comisión Covid-19 puede declarar que ya estamos ante una nueva ola, con un incremento de contagios y hospitalizaciones”, avaló el científico Marco Tulio Medina al noticiero TSI.
En ese sentido, varios sectores de la sociedad expresan que se deben de reforzar las medidas de bioseguridad y que no se quite el uso obligatorio de la mascarilla.
Las escuelas privadas (bilingües) envían comunicados a los padres de familia solicitando mantener el tapabocas y han retomado las medidas sanitarias en las instalaciones.
El sector transporte también solicita que se refuercen las medidas. Don José Martínez, operario de un rapidito Río Grande- Loarque, dijo que los pasajeros deben portar la mascarilla, más con la nueva ola. “La gente es burra, por eso es que está este incremento de covid, aquí se suben y sin mascarillas, pero yo no puedo bajarlos”, lamentó.
ADEMÁS: Dinaf advierte que niños quemados por pólvora esta Navidad serán separados de sus padres
