“No hay que confundir el cebo con la manteca”, es una frase expresada por el diputado liberal por Cortés, Carlos Antonio Martínez, en relación a la propuesta del presidente, Porfirio Lobo, de darle en forma permanente el rol policial a los militares.
Martínez expresó que las Fuerzas Armadas tienen un rol importante de defender la soberanía y el territorio, los soldados son entrenados para la guerra, en tanto los policías son instruidos para la protección civil y los bienes de las personas.
El que estudia para militar recibe una capacitación diferente a la del policía, indicó el congresista que se manifestó opuesto a una reforma constitucional para darle a los militares el rol de policías.
A finales del 2011, el Congreso Nacional interpretó la Constitución de la República que daba potestades a las Fuerzas Armadas a ejecutar el rol policial, es decir allanar, capturar y patrullar, pero en forma temporal por cuestiones de caso fortuito, vale decir por la alta ola de inseguridad.
El diputado del Pinu, Toribio Aguilera, consideró que sería un error “gravísimo” por dos motivos: el país necesita de un cuerpo armado entrenado permanentemente para defender el territorio nacional y, no se puede exponer a los miembros de esta institución a una contaminación del narcotráfico.
Aguilera afirmó que la misma Constitución faculta a las FF AA, colaborar con la Policía, pero en forma temporal y no permanente como plantea el presidente Lobo. “Yo creo que esa iniciativa de darle un rol permanente de protección civil a las Fuerzas Armadas no tendría eco en el Congreso”, citó.
Por su lado, el diputado de la Democracia Cristiana, Orle Solís, indicó que posiblemente el presidente Lobo esté pensando de que puedan venir momentos difíciles y que se tiene que preparar a las Fuerzas Armadas para dar respuesta a la cada vez más creciente inseguridad.
Sin embargo, no se debe descuidar el rol principal de las Fuerzas Armadas que es la defensa de la soberanía y el territorio nacional, indicó.
El diputado liberal, José Azcona, indicó que los operativos de la forma en que están planteados no han tenido operatividad debido a que los batallones están muy alejados de las ciudades y esto implica transportar día a día a los soldados con un gasto que eleva los costos de las Fuerzas Armadas.
En ese sentido, recomendó que el gobierno debe darle viento al proyecto de cooperación que ha expuesto el gobierno de Estados Unidos de crear la policía militar dentro de las Fuerzas Armadas, como ya lo hubo en su momento en Honduras.
Esto ayudaría a tener un cuerpo armado que permanentemente estaría apoyando a la Policía en su función de prevención, detención, represión e investigación del delito.
No creo que se ocupe reformar la Constitución para crear una policía militar, porque la función de apoyo ya está establecida en la misma Carta Magna, precisó.