TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los ventiladores mecánicos son considerados la última esperanza de vida de los pacientes graves afectados por el Covid-19.
En las últimas semanas se han convertido en la principal arma para luchar contra esta nueva pandemia.
Estos son aparatos clínicos que se utilizan en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de los hospitales, en pacientes que tienen problemas severos en sus pulmones. Estos respiradores se vuelven de urgente necesidad porque se estima que aproximadamente un 5% de los enfermos de Covid-19 termina padeciendo el llamado síndrome de distrés o también conocido como Síndrome de Dificultad Respiratoria del Aguda (SDRA).
Una de sus principales funciones es apoyar al pulmón cuando falla, es decir que ayuda al paciente a respirar.
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Los pacientes son conectados a un ventilador, cuando los pulmones colapsan a causa de una neumonía severa, las máquinas introducen aire a los pulmones y lo extraen, facilitando la respiración de una persona que no puede hacerlo por sí misma.
Instalación
Generalmente se introduce un tubo de plástico por la boca o nariz hasta la traquea. A este proceso se le llama intubación.
El tubo irá conectado al respirador, que no es más que una computadora que debe ser controlada por el personal de salud asignado la Unidad de Cuidados Intensivos, señala la reseña de una empresa fabricante de ventiladores mecánicos.
En el caso que el paciente necesite el respirador por un periodo de tiempo elevado, se inserta el tubo directamente en la traquea.
El ventilador suministra oxígeno puro o en su defecto una combinación de oxígeno o aire.
Tiene sondas que se conectan a la persona a través de un tubo de respiración. El tubo de respiración se coloca en la boca de la persona o en una abertura a través del cuello hasta la tráquea, denominada traqueotomía.
Produce ruido y tiene alarmas que alertan al equipo de atención médica cuando es necesario arreglar o cambiar algo, dice la reseña.
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Escasos
Ante la gran cantidad de personas en estado crítico por coronavirus alrededor del mundo, los ventiladores mecánicos se han escaseado en las empresas fabricantes.
Y es que hasta las principales potencias mundiales, Estados Unidos, Francia, Italia, Inglaterra, entre otras, se están viendo afectadas por la ausencia de ventiladores mecánicos.
En algunos de estos países, se han visto en la penosa situación en determinar qué paciente es conectado o no a la máquina respiratoria.
En el caso de Honduras, la situación es aún más precaria. Desde antes que se declarara el Estado de Emergencia, el sistema sanitario público del país solamente contaba con unos cien ventiladores.
Hace una semana, el gobierno anunció la compra de otros 130 ventiladores, un médico hondureño donó 30 y el Consejo Empresarial para América Latina donó otros 21 ventiladores. Es decir que la capacidad de Honduras ronda los 280 ventiladores
