'El no quería ya regresar a este país porque no tenía oportunidades. A ellos los tratan de delincuentes; mi sobrino no era delincuente, el era trabajador, con sueños, ilusiones y quizá por eso tomó esa decisión de irse', dijo Leticia Reyes Banegas, tía del hondureño al noticiero Hoy Mismo.
Henry Adalid murió la tarde del domingo a causa de un disparo de bala de goma en un enfrentamiento entre policías y migrantes en la frontera de Guatemala con México.
El joven era uno de los 1,500 integrantes de la segunda caravana que intentaba alcanzar a los hondureños que salieron el pasado 13 de octubre desde San Pedro Sula.
Según su tía, el hondureño trabajaba como transportista, pero decidió emprender el viaje debido a que ganaba poco y no le alcanzaba el dinero para ayudar a su hijo de siete años.
Henry Adalid estaba casado y su esposa iba en la primera caravana de emigrantes.
'El salió un viernes a las 5:00 de la tarde, no recuerdo la fecha; me dijo tía ya me voy y yo le dije cuidate hijo', detalló.
Continuó: 'Cuando el me llamó de Guatemala me dijo que había peligro, venite papa le dije.'No tía yo a Honduras no regreso' me dijo', comentó la mujer, mientras sus lágrimas caían en su rostro.
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La tía de Adalid no volvió a tener comunicación con el hondureño hasta que los amigos -con quienes viajaba- la llamaron para darle la fatal noticia.
'Usted mira en las redes sociales cómo los están atacando a estos jóvenes y no es justo porque ellos tenían una esperanza, una ilusión de poder cumplir su sueño y salir adelante', lamentó la tía de Henry Adalid.
Solicita ayuda
El cuerpo del hondureño se encuentra en Guatemala y para repatriarlo una funeraria le solicitaba 100 mil lempiras a la familia.
'Nosotros no tenemos ese dinero', dijo la tía de Hernry Adalid, quien solicitó apoyo a Cancillería para poder traer los restos de su sobrino
Este joven es la tercera víctima mortal en la caravana de migrantes que viaja a Estados Unidos.
Un hondureño murió en Guatemala y otro en México, ambos al caer de un camión que les daba jalón.