Tegucigalpa, Honduras
Cinco días separan a 56,790 familias hondureñas de conocer su futuro en Estados Unidos como amparados del Estatus de Protección Temporal (TPS).
Existen tres posibles escenarios para visualizar su destino, cada uno de ellos con ventajas y desventajas a considerar.
Ricardo Puerta, experto en temas migratorios, conversó con EL HERALDO sobre los panoramas que se prevén.
A juicio del experto, una ampliación del TPS por 18 meses más resulta lejos de considerar.
El presidente estadounidense Donald Trump es el artífice de la eliminación del estatus para los migrantes producto de sus inhumanas políticas migratorias. En ese sentido, el soberano Congreso de Estados Unidos recibió la petición del mandatario y les encomendó definir la situación legal para estas personas.
“Ampliar el TPS por 18 meses es decirle al presidente, esa decisión que usted tomó está errada, sería una bofetada a Trump y no va a suceder” analizó Puerta. Es de conocimiento que la decisión es soberana por parte de Estados Unidos, que existe apoyo al TPS en el Congreso, pero no se le dará la espalda a un mandato presidencial.
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¿Doce meses?
Ante este panorama es de considerar 12 meses como otra opción. De trece extensiones que ha recibido Honduras, cuatro han sido de doce meses, la última en el año 2006.
La connotación diferente parte del hecho que recibir 12 meses es garantizar TPS por todo el 2018 en un periodo de tiempo que permita generar opciones para los hondureños amparados en el programa.
“Sería lo ideal, hay elecciones de la cámara baja, ambiente político que puede desembocar en propuestas a favor de los migrantes”, expuso.
En ese sentido ganar la cámara baja para los demócratas representaría recuperar el control del congreso, para eso se adhieren a una “venganza de los latinos” contra Trump en las urnas, donde necesitan 23 espacios para recuperar el control del Congreso, seducir a esos votantes por medio del tema migratorio es básico, aunque es de destacar que en la última contienda electoral este voto no pesó.
“Lo ideal sería una ley integral migratoria bipartidista, esto puede surgir como un proyecto de ley en las elecciones, tendríamos un año, y con nuevas autoridades en el Congreso”, argumentó Puerta.
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Solo medio año
Por último, se presentan seis meses de extensión al TPS como opción, “sería lo más probable que suceda, en esa ruta va orientada la decisión”, mencionó.
Como antecedente, Haití ya recibió esta extensión para sus tepesianos y en base a su experiencia es un lapso de tiempo demasiado corto para definir decisiones, deportaciones y soluciones.
Entre las ventajas de una ampliación de seis meses está que se terminaría con la incertidumbre de si habrá o no renovación al TPS. Además, ubica a Honduras seis meses por delante en una agenda abierta y en ese lapso se va presentar una campaña electoral en Estados Unidos que comenzará a calentarse de gran manera.
En el aspecto negativo el experto analizó que repercute debido a que seis meses de ampliación es una espera, pero no una solución. Además retomó que una ley integral migratoria sería excelente, “pero en ese lapso de tiempo tan corto, eso no va ocurrir, no antes de las elecciones de noviembre, pero la campaña electoral pudiera producir anteproyectos bipartidistas que tienen que ver con migración”, analizó.
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Cabildeos en EUA
Mientras estos panoramas toman rumbo, en Estados Unidos la comisión diplomática agresiva arrecia, esta vez con los representantes del Congreso Nacional que llegaron para fortalecer la lucha.
En ese sentido, en su primer día de gestiones tuvieron la oportunidad de recibir en el consulado de Washington a los líderes de hondureños migrantes de las organizaciones Hondusa, Fundación Humanitaria Hondureña, Coalición Garífuna en Nueva York, Hispanic Royer USA, Hondureños Unidos en Massachusetts y de la Fundación Olanchanos Unidos, entre otros.
Waldina Paz, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, mencionó que “fue un día productivo, estamos complacidos, la comunidad hondureña se siente feliz, por primera vez se sienten tomados en cuenta como comunidades”.
Estas asociaciones recién la semana pasada lideraron en conjunto visitas a congresistas y senadores a los que les entregaron cartas para recibir su apoyo.
La misión diplomática también tuvo la oportunidad de reunirse con conferencistas religiosas católicas que les orientaron sobre la forma en que deben dirigirse hoy ante los seis congresistas que visitarán en una amplia agenda que incluye otorgarles una carta por parte de la comisión en la que les solicita públicamente su apoyo de cara a la decisión final de esta semana.