CHOLUTECA, HONDURAS.-La migración irregular de menores de edad originarios de la zona sur del país no se detiene.
Desde el último trimestre de 2019 y los primeros dos meses del presente año se reporta el retorno de 500 menores a esta región, según un informe de la Dirección de la Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf).
Estas cifras van en aumento en comparación con el 2018, cuando regresaron a suelo hondureño 415 menores originarios y residentes en el sur.
“Las movilizaciones atípicas (caravanas) detonaron esa alta incidencia y también las políticas migratorias se endurecieron de tal manera que vemos que son muy pocas las personas que pudieron ingresar o permanecer por más tiempo”, explicó Rosa Estrada, oficial de migración infantil de la Dinaf.
La mayoría de retornados son menores de entre los 12 y 17 años de edad, siendo los varones los más afectados. El desafío de la Dinaf es lograr que los niños retornados puedan vivir un proceso de reinserción, principalmente en el sistema educativo.
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Vigilancia
Las constantes acciones de vigilancia en las fronteras de la zona sur permiten identificar que la mayoría de los menores que salen del país lo hacen a través de las fronteras norte y occidente.
Las autoridades de la Dinaf también prestan atención a los pequeños que entran de manera irregular al país.
“En el sur tenemos dos escenarios, por una parte los niños de otras nacionalidades que cruzan por la zona y nuestros compatriotas que migran hacia otros países, en ambos casos aseguramos que las movilizaciones se realicen en el marco de la ley y asegurando la protección de los menores a fin de que no sean víctimas de delitos”, dijo Elba Reyes, directora regional del Dinaf para la zona sur.
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