Ascenso y caída de JOH: Del poder absoluto a un juicio por narcotráfico en EUA

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Dos diputaciones al hilo, la presidencia del Congreso Nacional y posteriormente la silla presidencial, resumen cómo Juan Orlando Hernández transitó del poder absoluto a enfrentar un juicio por cargos de narcotráfico en Estados Unidos.

Los logros de JOH, alcanzados a lo largo de sus 30 años de participación activa en la política hondureña, se originan desde sus primeros pasos como asistente de su hermano Marco Augusto Hernández hasta llegar a la presidencia de Honduras en los periodos 2014-2018 y 2018-2022.

Sus más fieles seguidores lo definen como un líder letrado, metódico, y audaz, pues desde que fue elegido diputado del Partido Nacional por Lempira en 1997 no descansó hasta ostentar el cargo más alto de un país: la presidencia de la República.

Durante su mandato como presidente del Congreso, Juan Orlando Hernández impulsó la sustitución de cuatro de los cinco magistrados de la Sala de lo Constitucional. Estos magistrados, posteriormente, respaldaron su reelección presidencial en 2017.

Y así fue como empezó a gobernar cuatro años más, pero esta vez desmintiendo denuncias por presuntos actos de corrupción, violación a la Constitución y las leyes, concentración del poder, y el cuestionado manejo de la pandemia del covid-19 en 2020.

Juan Orlando Hernández se enfrentó al escrutinio de la justicia estadounidense incluso antes de dejar la silla presidencial. En un rápido giro de eventos, se despidió de la presidencia de Honduras a finales de enero de 2022 y tan solo 18 días después, el 14 de febrero de ese mismo año, fue solicitado oficialmente en extradición por la Corte del Distrito Sur de Nueva York.

A continuación, el ascenso y caída de JOH, quien guarda prisión en Estados Unidos donde enfrenta acusaciones por narcotráfico.