La Navidad es sinónimo de alegría, paz y regocijo espiritual y viene acompañada de costumbres y mágicas tradiciones.
Una de ellas tiene que ver con la fidelidad de escribir cartas a un famoso personaje que habita en un lugar inhóspito llamado Polo Norte, separado de Honduras por más de “sin cuenta” kilómetros.
“Querido Santa: me porté bien en todo este año y quiero que me traigas muchos, muchos juguetes”, rezan las misivas que los niños capitalinos le envían al viejecito bonachón de larga barba blanca.
Los niños que aún creen en este legendario personaje ya fueron tras su pista y hacen pedidos especiales para sus hermanos menores, piden útiles escolares para seguir estudiando, trabajo para sus familiares y que la Navidad perdure todo el año.
Jefry Fernando Mendoza, en una enternecedora carta, le pide a Santa un pepe para su hermanito de seis meses Beayan Mendoza.
Tatiana Zelaya de 13 años se trasladó desde la colonia Torocagua a las oficinas de la Empresa de Correos de Honduras (Honducor) en el centro histórico para solicitar útiles escolares.
“Traigo mi carta y la de mis dos primos, queremos que Santa nos ayude a seguir en la escuela al traernos cuadernos y lápices”, manifestó con una expresión de ilusión.
Como ellos, 200 niños más le escribieron a Santa con la esperanza de encontrar debajo de sus árboles en la mañana de Navidad un presente con estampas del Polo Norte.
Francisco Munguía, jefe del departamento de Despachos Públicos, confirmó que este año las cartas se duplicaron.
“Gracias a la campaña de EL HERALDO, los niños creen más en Santa, pues en la entrega de regalos comparten con él, es toda una bendición que los niños que no tienen juguetes los obtengan por medio de una carta”, expresó.
Y es que, por cuarto año consecutivo, EL HERALDO se da a la tarea de mantener vivas las ilusiones de los pequeñines que creen en Santa e intentará con la ayuda de sus ayudantes cumplir muchos sueños navideños.