Este número, actualizado al 1 de julio del 2018 con datos provisionales, confirma el fuerte movimiento migratorio hacia suelo español desde Honduras, pues el reporte a mediados de 2017 daba cuenta de unas 64,000 personas nacidas en Honduras que vivían en España, un incremento de 20,000 en apenas un año.
Es el mayor aumento de hondureños registrado en los últimos diez años. Entre el 2009 y 2015, hubo un incremento estable de compatriotas, pero a partir de 2015 la gráfica se dispara, al punto que en apenas tres años se duplicó la comunidad hondureña: de unos 44,000 a mitad de ese año a los 84,000 que cifran a mediados de este 2018.
Varios analistas y activistas hondureños radicados en el país europeo opinan que esta evolución migratoria hacia España está empujada por la reagrupación familiar, la intensificación de las políticas antimigratorias de Estados Unidos y la crisis económica y política en Honduras.
Con estos números se puede anticipar que el 2018 cerrará con casi 96,000 hondureños viviendo en España. Para este análisis, se partió de los datos de la población residente en España que nació en Honduras, y no la nacionalidad, pues hay un margen de hondureños que con el tiempo adquieren la nacionalidad española.
España es más flexible que Estados Unidos en cuanto a la integración de los migrantes, principalmente para la población latina. Aunque ingresen de forma irregular, en tres años pueden legalizar su estatus migratorio y aplicar a la residencia.
Sin embargo, el gobierno español mantiene protocolos en los aeropuertos para evitar el ingreso de personas que no viajen con la documentación adecuada. Ese es el motivo por el que se negó la entrada a casi 4,000 hondureños en los últimos diez años.
