El sitio independiente Global Firepower, especializado en industria militar, pone a estas tres potencias mundiales en lo más alto y, precisamente, son las que pueden involucrarse en una 'tercera guerra mundial', especialmente después de que Estados Unidos asesinara al general iraní Qasem Soleimani en un ataque con drones.
La muerte del general iraní ha desencadenado una serie de amenazas entre Donald Trump e Irán, quienes juraron vengar su muerte con un ataque militar.
En medio del conflicto, varios países aliados de Washington y Teherán reaccionaron, dejando una postura clara de 'resolver cualquier problema en la mesa de negociaciones'.
Vladimir Putin, presidente de Rusia, el segundo país con uno de los ejércitos más poderosos después de Estados Unidos y aliado de Irán, pidió a las potencias 'contenernos a la hora de llevar a cabo acciones extremas o peligrosas en las relaciones internacionales”.
China, que mantiene buenas relaciones con el gobierno iraní, exhortó a Estados Unidos a 'no abusar de la fuerza', ya que podrían 'agravar las tensiones y las turbulencias regionales'.
China se 'opone al recurso de la fuerza en las relaciones internacionales. Los medios militares como la presión extrema están abocados al fracaso', afirmó el canciller chino Wang Yi.
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Mientras Francia, Reino Unido y Alemania pidieron a la Unión Europea adoptar nuevas sanciones contra Irán por su programa nuclear, incumpliendo el acuerdo que concretó en 2015.
La situación entre Irán y Estados Unidos está en la mira del mundo, especialmente de las potencias mundiales que tienen intereses en el Medio Oriente.
Ataques de Irán
El martes, Irán lanzó 22 misiles contra bases militares iraquíes donde había personal militar estadounidense. Los ataques no dejaron pérdidas humanas, según dijo el mismo presidente estadounidense.'Estados Unidos está listo para abrazar un proceso de paz y a todo aquel que lo busque', solicitó el mandatario en una conferencia de prensa para reducir la tensión, mientras Irán respondió lanzando dos cohetes a la llamada Zona Verde en Bagdad.
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'No es suficiente venganza', dijo Ali Jamenei, líder supremo de Irán, tras el ataque a las dos bases con presencia estadounidense. 'Estados Unidos es el enemigo de Irán', continuó diciendo.
Para los expertos, la respuesta de Irán fue algo apresuparada para complacer a la opinión pública, pero 'intentaron la cuadratura del círculo, un ataque muy proporcionado cuya naturaleza no busca necesariamente provocar la respuesta prometida por Trump', señaló François Heisbourg, experto de la Fundación para la Investigación Estratégica.