San Salvador, El Salvador
Las autoridades salvadoreñas decretaron el martes estado de emergencia en siete cárceles y trasladaron a un penal en el occidente del país a 299 cabecillas de las pandillas que permanecerán aislados, en una de las primeras medidas extraordinarias anunciadas por el gobierno para combatir a estos grupos criminales.
Las autoridades salvadoreñas decretaron el martes estado de emergencia en siete cárceles y trasladaron a un penal en el occidente del país a 299 cabecillas de las pandillas que permanecerán aislados, en una de las primeras medidas extraordinarias anunciadas por el gobierno para combatir a estos grupos criminales.
El estado de emergencia implica el encierro permanente de los reclusos, así como la suspensión de visitas íntimas y familiares durante quince días.
Los líderes de las pandillas fueron trasladados de otras cárceles hasta el penal de Quezaltepeque a 25 kilómetros al oeste de la capital, al ser identificados por las autoridades como los principales responsables de estar ordenando crímenes y todo tipo de hechos delictivos desde las cárceles.
'Van estar sometidos a un régimen de mayor seguridad, de mayor control para garantizar el cese de la comunicación desde el interior del sistema (penitenciario), partiendo que han sido identificados como los principales involucrados en realizar la comunicación hacia afuera, en dirigir y coordinar las actividades ilícitas de los miembros de sus grupos delincuenciales', dijo en conferencia de prensa el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Mauricio Ramírez Landaverde.
El jefe de la seguridad pública que llegó hasta el penal de Quezaltepeque para verificar las nuevas medidas anunció que unidades combinadas de la policía y el ejército desarrollarán operaciones de seguridad dentro y fuera de los diferentes centros penales del país.
Informó que en los alrededores de las cárceles realizarán patrullajes, verificarán las viviendas particulares y todo tipo de establecimientos que estén ubicados en las proximidades debido a que ha sido usados por las pandillas 'para mantener su influencia en el entorno de los centros penales'.