La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) de Chile anunció el levantamiento del estado de precaución por tsunami en costas del sur del país tras registrarse un terremoto de 7,6 grados Richter este domingo.
'El estado de precaución se cancela en todo Chile', declaró en rueda de prensa Ricardo Toro, director de la Onemi, tres horas después de ocurrido el fuerte sismo en la región de Los Lagos, 1021 km al sur de Santiago.
Luego del movimiento telúrico, las autoridades decretaron alerta de tsunami, que después bajaron a 'precaución' antes de cancelarla totalmente, lo que permite a los más de 4.000 pobladores que fueron evacuados regresar a sus casas.
De acuerdo a la Onemi, a raíz del sismo 'no hay pérdida de vidas humanas' según los primeros reportes.
En localidades como Ancud, transcurridas casi dos horas del sismo, 'se vivía una completa normalidad', relató a Canal 13 el alcalde de la localidad Carlos Gómez.
En los primeros minutos tras el terremoto, se registraron cortes en el suministro eléctrico y el colapso de las líneas telefónicas.
Algunas casas sufrieron algunos daños tras la caída de artefactos y otros objetos, relató el alcalde Gómez.
Pero, la carretera que conecta con el continente sufrió daños de consideración, que originaron cortes parciales en varias zonas de la ruta.
- Sismo en Navidad -
'Mucha fuerza y ánimo a los compatriotas afectados por el sismo en Chiloé y otras zonas del sur! Protocolos de emergencia ya están operando', dijo la presidenta Michelle Bachelet en su cuenta de Twitter.
El terremoto causó pavor en la población, que inmediatamente subió a las redes sociales videos en los que se evidencia el fuerte movimiento de lámparas y muebles, además de la caída de productos de las góndolas de los supermercados.
El sismo sorprendió a la población en Navidad, un día en que todo el comercio se encuentra cerrado por tratarse de un feriado de carácter irrenunciable.
Chile es uno de los países más sísmicos del mundo y ha puesto en marcha una estricta norma de construcción antisísmica, destinada a salvar vidas y evitar el colapso de los edificios.
En septiembre del año pasado, un terremoto de 8,4 en la escala de Richter seguido de un tsunami sacudieron la región de Coquimbo, provocando la muerte de 15 personas.
En 2010, otro sismo de 8,8, seguido también de un tsunami, azotó el centro y sur del país, dejando más de 500 muertos.