Lima, Perú
La lucha contra la corrupción es el tema dominante de la Cumbre de las Américas que se inicia este viernes en Lima, pero la dificultad de alcanzar una posición común sobre la crisis en Venezuela ya acapara buena parte de los debates.
La reunión de mandatarios se realiza en ausencia notable de los presidentes Donald Trump, Nicolás Maduro y Lenín Moreno y con el telón de fondo de la crisis venezolana y el asesinato de un equipo de prensa ecuatoriano en la frontera con Colombia.
Los mandatarios Evo Morales (Bolivia), Juan Manuel Santos (Colombia), Enrique Peña Nieto (México), Sebastián Piñera (Chile), el anfitrión Martín Vizcarra (Perú) y el primer ministro de Canadá Justin Trudeau, participaron en la III Cumbre Empresarial, antesala de la Cumbre de las Américas que se inicia esta noche con una cena oficial en la presidencia peruana.
'Un porcentaje importante del erario nacional se pierde por la corrupción (...). Esto tiene que cambiar', afirmó Vizcarra ante los empresarios.
'Un gran aliado de la transparencia es la revolución tecnológica. La impunidad es un gran aliado de la corrupción', dijo por su parte Piñera.
Sin embargo, Venezuela ha acaparado la atención en las horas previas a la cumbre. Maduro no fue invitado y desistió de venir como había prometido, pero en las calles limeñas estuvo presente en manifestaciones convocadas por seguidores y detractores.
Desde Caracas, la oposición pidió a los participantes del cónclave hemisférico que rechacen las elecciones del 20 de mayo, boicoteadas por la mayor parte de la oposición.
En Lima, las delegaciones que se encargan de pergeñar la declaración final de la Cumbre trataban de disipar diferencias para alcanzar una fórmula sobre Venezuela aceptable para todos. Según fuentes cercanas a la negociación, podría haber consenso para incluir la fórmula 'los resultados de las elecciones carecen de legitimidad y credibilidad' en vez de desconocer el resultado de los comicios como proponen los 14 países del Grupo de Lima.
El canciller chileno, Roberto Ampuero, que se reunió en la embajada de Chile en Lima con los diputados venezolanos Luis Florido y Sergio Vergara, afirmó en una declaración que 'es importante para Chile que haya elecciones libres, con garantías para todos'.
'Si esto no ocurre, las elecciones son ilegítimas, no son válidas y no van a ser reconocidas ni por Chile ni por la comunidad internacional', aseguró.
Chile, tercer receptor de venezolanos después de Colombia y España, acaba de crear una 'visa de responsabilidad democrática' para los venezolanos que 'escapan del país buscando democracia y prosperidad'.
En Quito, el presidente Lenín Moreno confirmó el asesinato en cautiverio de los dos periodistas y el chofer del diario El Comercio, que habían sido secuestrados el 26 de marzo en la frontera con Colombia por un grupo disidente de la exguerrilla de las FARC.
Santos condenó el hecho y desde Lima manifestó su respaldo a Ecuador 'para que los responsables de este crimen sean llevados a la justicia'.
En tanto, en canciller cubano Bruno Rodríguez llegó a Lima para representar a la isla en la cumbre, según fuentes oficiales peruanas, lo que implica que no asistirán Raúl Castro ni Miguel Díaz-Canel, quien lo debería suceder en la presidencia en los próximos días.
Ivanka Trump, activista
En una cumbre dedicada a la corrupción que socava la democracia y el desarrollo de la región, la estrella de la jornada ha sido Ivanka Trump, la hija mayor de Donald Trump, ausente de Lima por la crisis de Siria.
La joven empresaria y exmodelo anunció en el marco de la Cumbre Empresarial un plan de 150 millones de dólares para insertar a las mujeres en la economía latinoamericana.
'Por cada dólar que invirtamos, el sector privado movilizará 3 más', dijo la empresaria, que espera alcanzar los 500 millones de dólares para fomentar el 'acceso al capital, el trabajo y las oportunidades' de las mujeres.
Y es que cuando una mujer tiene éxito, 'la familia, la comunidad y el país también lo tienen', dijo la joven, que participó en un panel para hablar del empoderamiento económico de la mujer con alianzas público-privadas.
Ivanka Trump y su marido Jared Kushner forman parte de la delegación de Estados Unidos en la cumbre en Lima, liderada por el vicepresidente Mike Pence.
La iniciativa de Ivanka Trump se suma al compromiso de ocho multinacionales, con el impulso del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), de sumarse al #100KChallenge para capacitar, conectar y certificar a más de 100.000 mujeres de empresas de las Américas para 2021.
Y es que en la época del #Metoo, empresarios, políticos, periodistas y analistas han analizado a lo largo de dos días las formas para incentivar la vocación empresarial de las mujeres en la región que cuenta sólo con un 12% de mujeres en cargos directivos.
El Producto Interno Bruto (PIB) de América Latina crecería en 2.500 millones de dólares si la brecha de género de participación laboral se cerrara completamente, aseguran los organizadores.
La lucha contra la corrupción es el tema dominante de la Cumbre de las Américas que se inicia este viernes en Lima, pero la dificultad de alcanzar una posición común sobre la crisis en Venezuela ya acapara buena parte de los debates.
La reunión de mandatarios se realiza en ausencia notable de los presidentes Donald Trump, Nicolás Maduro y Lenín Moreno y con el telón de fondo de la crisis venezolana y el asesinato de un equipo de prensa ecuatoriano en la frontera con Colombia.
Los mandatarios Evo Morales (Bolivia), Juan Manuel Santos (Colombia), Enrique Peña Nieto (México), Sebastián Piñera (Chile), el anfitrión Martín Vizcarra (Perú) y el primer ministro de Canadá Justin Trudeau, participaron en la III Cumbre Empresarial, antesala de la Cumbre de las Américas que se inicia esta noche con una cena oficial en la presidencia peruana.
'Un porcentaje importante del erario nacional se pierde por la corrupción (...). Esto tiene que cambiar', afirmó Vizcarra ante los empresarios.
'Un gran aliado de la transparencia es la revolución tecnológica. La impunidad es un gran aliado de la corrupción', dijo por su parte Piñera.
Sin embargo, Venezuela ha acaparado la atención en las horas previas a la cumbre. Maduro no fue invitado y desistió de venir como había prometido, pero en las calles limeñas estuvo presente en manifestaciones convocadas por seguidores y detractores.
Desde Caracas, la oposición pidió a los participantes del cónclave hemisférico que rechacen las elecciones del 20 de mayo, boicoteadas por la mayor parte de la oposición.
En Lima, las delegaciones que se encargan de pergeñar la declaración final de la Cumbre trataban de disipar diferencias para alcanzar una fórmula sobre Venezuela aceptable para todos. Según fuentes cercanas a la negociación, podría haber consenso para incluir la fórmula 'los resultados de las elecciones carecen de legitimidad y credibilidad' en vez de desconocer el resultado de los comicios como proponen los 14 países del Grupo de Lima.
El canciller chileno, Roberto Ampuero, que se reunió en la embajada de Chile en Lima con los diputados venezolanos Luis Florido y Sergio Vergara, afirmó en una declaración que 'es importante para Chile que haya elecciones libres, con garantías para todos'.
'Si esto no ocurre, las elecciones son ilegítimas, no son válidas y no van a ser reconocidas ni por Chile ni por la comunidad internacional', aseguró.
Chile, tercer receptor de venezolanos después de Colombia y España, acaba de crear una 'visa de responsabilidad democrática' para los venezolanos que 'escapan del país buscando democracia y prosperidad'.
En Quito, el presidente Lenín Moreno confirmó el asesinato en cautiverio de los dos periodistas y el chofer del diario El Comercio, que habían sido secuestrados el 26 de marzo en la frontera con Colombia por un grupo disidente de la exguerrilla de las FARC.
Santos condenó el hecho y desde Lima manifestó su respaldo a Ecuador 'para que los responsables de este crimen sean llevados a la justicia'.
En tanto, en canciller cubano Bruno Rodríguez llegó a Lima para representar a la isla en la cumbre, según fuentes oficiales peruanas, lo que implica que no asistirán Raúl Castro ni Miguel Díaz-Canel, quien lo debería suceder en la presidencia en los próximos días.
Ivanka Trump, activista
En una cumbre dedicada a la corrupción que socava la democracia y el desarrollo de la región, la estrella de la jornada ha sido Ivanka Trump, la hija mayor de Donald Trump, ausente de Lima por la crisis de Siria.
La joven empresaria y exmodelo anunció en el marco de la Cumbre Empresarial un plan de 150 millones de dólares para insertar a las mujeres en la economía latinoamericana.
'Por cada dólar que invirtamos, el sector privado movilizará 3 más', dijo la empresaria, que espera alcanzar los 500 millones de dólares para fomentar el 'acceso al capital, el trabajo y las oportunidades' de las mujeres.
Y es que cuando una mujer tiene éxito, 'la familia, la comunidad y el país también lo tienen', dijo la joven, que participó en un panel para hablar del empoderamiento económico de la mujer con alianzas público-privadas.
Ivanka Trump y su marido Jared Kushner forman parte de la delegación de Estados Unidos en la cumbre en Lima, liderada por el vicepresidente Mike Pence.
La iniciativa de Ivanka Trump se suma al compromiso de ocho multinacionales, con el impulso del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), de sumarse al #100KChallenge para capacitar, conectar y certificar a más de 100.000 mujeres de empresas de las Américas para 2021.
Y es que en la época del #Metoo, empresarios, políticos, periodistas y analistas han analizado a lo largo de dos días las formas para incentivar la vocación empresarial de las mujeres en la región que cuenta sólo con un 12% de mujeres en cargos directivos.
El Producto Interno Bruto (PIB) de América Latina crecería en 2.500 millones de dólares si la brecha de género de participación laboral se cerrara completamente, aseguran los organizadores.