El gobierno determinó además que los extranjeros con residencia en el país centroamericano perderán su condición migratoria si viajan al exterior.
Las nuevas medidas se dictaron en momentos de consternación por el crecimiento de los contagios en Costa Rica, que registra 158 casos, por encima de los 134 anunciados el domingo.
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Dos adultos mayores han muerto por el Covid-19 en este país centroamericano.
'Estamos en un momento cumbre para reducir el impacto del contagio en el país. Acatemos las indicaciones de las instancias de salud y seamos responsables como ciudadanos', declaró el presidente, Carlos Alvarado, al anunciar las medidas en una conferencia de prensa a distancia.
El ministro de Seguridad, Michael Soto, comentó que el fin de semana agentes de la policía recorrieron playas para llamar a las personas a abandonar la zona cuando había aglomeraciones.
'Lamentablemente muchas personas no hicieron caso, ahora procederemos al cierre de las playas, y se abrirá un proceso penal a quien incumpla', indicó Soto.
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Alvarado agregó que el cierre de las iglesias se había adoptado parcialmente, pero se hará total a partir de esta semana, una medida tomada 'en diálogo con líderes religiosos de las denominaciones principales'.
La restricción vehicular nocturna comenzará a regir la noche del martes y tendrá una serie de excepciones, incluidos camiones de carga y servicios de salud y emergencia.
Las nuevas medidas se suman a la prohibición de actividades que impliquen aglomeración de personas, cierre de fronteras terrestres, aéreas y marítimas y prohibición de entrada de extranjeros, adoptadas para frenar la propagación del coronavirus.
