El ataque se registró el pasado sábado 14 de septiembre y se registraron serios daños a las instalaciones.
Por el momento, la planta petrolera se encuentra trabajando a medio vapor, ya que tuvo que dismunuir el 50 por ciento de su producción, misma que es fundamental para el abastecimiento mundial.
Dos instalaciones fueron afectadas y cerca de diez drones habrían provocado el desastre, según el reporte de las autoridades.
Algunos medios han infomado que los bombardeos han sido adjudicados a los 'Rebeldes Hutíes de Yemén', un grupo insurgente de la región.
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Sin embargo, autoridades del servicio de inteligencia de Estados Unidos aseguran que el ataque fue producido por Irán, ya que se han mantenido enfrentamientos entre ambos países desde hace algún tiempo.
'Fue Irán. Los hutíes están reclamando crédito por algo que no hicieron' dijo un funcionario estadounidense durante una entrevista con ABC News.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se pronunció al respecto, diciendo que Riad cuenta con su apoyo y que está listo para proceder contra los causantes del desastre en la planta petrolera.
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'El suministro de petróleo de Arabia Saudita fue atacado. Hay razones para pensar que sabemos el culpable, estamos cargados y listos, pendientes de verificación, pero estamos esperando a oír del reino sobre quién creen que fue la causa de este ataque, ¡y bajo qué términos procederíamos!', escribió el presidente Donald Trump en Twitter.
Mientras tanto, se desconoce a cuándo ascienden las pérdidas económicas que se han generado producto de las fallas en la producción.
