TEL AVIV, ISRAEL.-Familiares de rehenes israelíes retenidos en Gaza presentaron el sábado en Tel Aviv una réplica de los túneles del movimiento islamista palestino Hamás, donde creen que sus allegados siguen cautivos, 100 días después de su captura.
La instalación de 30 metros de largo se inauguró frente al museo de arte de Tel Aviv. Eyal Moar, sobrina de un rehén, dijo estar consciente de que sólo era “una pequeña parte” de la experiencia que vive su tío Abraham Munder, de 79 años.
Munder fue una de las cerca de 250 personas capturadas en el ataque de milicianos de Hamás en Israel, que dejó unos 1.140 muertos, en su mayoría civiles, según un balance de AFP basado en datos oficiales.
“Sabemos que las condiciones son horribles: sin aire fresco, muy poca comida, sin medicamentos, sin luz del día, duermen en el piso”, afirmó Moar a la AFP.
La instalación fue diseñada por el artista israelí Roni Levavi, que buscó crear “la reconstrucción más fiel” de los túneles de Gaza. Para ello, se basó en las imágenes difundidas por los medios, declaró a la AFP.
Los israelíes están convencidos de que los rehenes están retenidos en esta extensa red de túneles, construidos por debajo de la Franja de Gaza.
En su interior hay poca luz y se escuchan sonidos de disparos y bombardeos. El suelo está sucio. “Da una idea de lo que sienten los rehenes desde hace tantos días”, señaló Levavi.
“Es el único túnel (...) que tiene una luz al final”, opinó Inbar Goldstein. Varios de sus familiares fueron liberados durante una tregua de una semana en noviembre. Pero otros murieron el 7 de octubre.
Las autoridades israelíes calculan que de los cerca de 250 rehenes capturados, 132 siguen retenidos en Gaza, incluyendo 25 que se cree que fallecieron.
No es suficiente
Más de 100 rehenes fueron liberados durante la tregua de noviembre, pero el destino de los demás sigue sin estar claro.
La oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, informó el viernes que los rehenes van a recibir medicamentos gracias a un acuerdo negociado a través de Catar.
“No es suficiente”, dijo Ella Ben Ami, cuyo padre, Ohad Ben Ami, de 55 años, sigue en cautiverio.
“Lo quiero en casa, en el hospital, con buena asistencia sanitaria, no con asistencia sanitaria de Hamás”, insistió.
Israel bombardea Gaza desde el 7 de octubre. Los ataques aéreos dejaron al menos 23.843 muertos de momento, en su mayoría mujeres y menores, según el Ministerio de Salud del territorio palestino, gobernado por Hamás desde 2007.
Los militares israelíes afirman que los combatientes de Hamás trasladan a los rehenes a través de lo que denominan los “túneles del terror”. También los usan para almacenar armas y refugiarse de los bombardeos, aseguran.
Para los familiares de los rehenes, la sensación de estar atrapados en un túnel, incluso uno de utilería, fue angustiosa.
“Estuve allí cinco minutos y sólo quería salir corriendo”, contó Ben Ami. “Tenía la opción de huir, pero ellos no”.
Miles de personas se congregaron el sábado en la ciudad para pedir la liberación de los rehenes y expresarles su apoyo.
“Seguiremos viniendo aquí cada semana hasta que todo el mundo sea liberado”, prometió Edan Begerano, de 47 años.